La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) ha aprobado un nuevo fármaco altamente eficaz en la prevención del VIH, informó el miércoles la farmacéutica Gilead Sciences.

En los ensayos clínicos, el fármaco casi eliminó la propagación del virus entre las personas que recibieron una inyección cada seis meses.

Denominado Yeztugo, el fármaco ha suscitado expectación entre los defensores de la prevención del VIH. La esperanza es que la medicación pueda acelerar el obstinadamente lento descenso de la transmisión del virus en Estados Unidos.

“Se trata de la mejor oportunidad en 44 años de prevención contra el VIH”, afirmó Mitchell Warren, director ejecutivo de la organización sin ánimo de lucro AVAC.

Yeztugo o lenacapavir (su nombre genérico) es mucho más eficaz que los fármacos orales de prevención del VIH existentes, pues según expertos parece resolver los problemas que plantea el tener que tomar diariamente pastillas, en el caso de las personas con alto riesgo de contraer el VIH.

El presidente y director ejecutivo de Gilead, Daniel O’Day, sugirió el miércoles en un comunicado que el fármaco podría “acabar con la epidemia del VIH de una vez por todas”.

El fármaco se aprobó tras registrar asombrosos resultados en los ensayos clínicos. Los ensayos administraron a personas en riesgo de contraer el VIH inyecciones de lenacapavir cada seis meses, o píldoras diarias de Truvada, conocida como PrEP o pastilla de profilaxis preexposición.

Entre los hombres gay, bisexuales y trans, el grupo que recibió la inyección de Yeztugo tuvo una tasa de VIH un 89% inferior a la del que tomó Truvada.

En un ensayo similar entre mujeres cisgénero del África subsahariana, ninguna de las que recibieron Yeztugo contrajo VIH.

La inyección es la primera de una nueva clase de antirretrovirales que impiden que el VIH infecte y haga nuevas copias de sí mismo dentro de las células inmunes a las que se dirige. El lenacapavir se aprobó por primera vez en 2022, bajo la marca Sunleca, para su uso con otros medicamentos en el tratamiento de cepas del virus muy resistentes a los fármacos.

Todas las formas de PPrE funcionan de la misma manera: si hay suficiente cantidad del fármaco en el organismo cuando una persona se expone al VIH, es muy eficaz para evitar que el virus se arraigue y establezca una infección de por vida. El lenacapavir tiene una acción tan prolongada que sólo es necesario inyectarlo dos veces al año.