Elegir entre la Xbox Series S y la Xbox Series X puede generar dudas, sobre todo si buscas actualizar tu consola o dar el salto a la nueva generación. Ambas ofrecen acceso al mismo ecosistema, comparten funciones clave y ejecutan los mismos títulos, pero la experiencia final cambia según su potencia, almacenamiento y compatibilidad con juegos físicos. Si te preguntas que Xbox es mejor Series S o X, esta comparativa te ayudará a tomar una decisión informada según tu presupuesto, televisor y estilo de juego.
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Diferencias clave entre Xbox Series S y Xbox Series X
La principal diferencia entre ambos modelos está en la potencia gráfica. La Xbox Series X está pensada para jugar en 4K nativo con hasta 120 fps, integrando 12 teraflops de GPU y 16 GB de RAM GDDR6. Esto le permite manejar texturas más detalladas, efectos avanzados y una imagen más definida, especialmente en televisores 4K con HDR.
La Xbox Series S, por otro lado, tiene 4 teraflops de potencia y 10 GB de RAM. Su objetivo es ofrecer resolución 1440p y escalar a 4K mediante técnicas de reescalado. En pantallas Full HD o 1440p mantiene una excelente calidad gráfica, aunque sin llegar al nivel de la Series X.
Ambas comparten el procesador AMD Zen 2 de ocho núcleos, pero con ligeras variaciones en frecuencia: 3.8 GHz en Series X y 3.6 GHz en Series S.
Un punto clave a considerar es que la Series S no tiene lector de discos, por lo que solo funciona con juegos digitales.
Rendimiento y almacenamiento
Otro elemento importante al comparar que es mejor, Xbox Series S o Xbox Series X, es el almacenamiento. La Series X incluye un SSD NVMe de 1 TB, mientras que la Series S llega con 512 GB. Existe también una versión de Series S de 1 TB que ayuda a equilibrar esta diferencia.
El almacenamiento influye porque los juegos actuales ocupan cada vez más espacio. Aunque ambas admiten tarjetas de expansión oficiales, estas suelen tener un costo elevado.
En cuanto al rendimiento, la Series X mantiene resoluciones altas con mejor estabilidad, mientras que la Series S suele priorizar los 60 fps a cambio de menor calidad visual. Para la mayoría de los jugadores casuales, la diferencia no impacta profundamente, pero si buscas texturas más detalladas y efectos de iluminación avanzados como el ray tracing, la Series X marca una clara ventaja.
Eso sí, ambas disfrutan de las mismas mejoras de nueva generación: carga casi instantánea gracias al SSD, tiempos reducidos al iniciar juegos y funciones como Quick Resume.
Diseño, tamaño y portabilidad
La diferencia física entre ambas consolas también influye en la decisión. La Xbox Series S es notablemente más pequeña y ligera, lo que la hace ideal para departamentos, escritorios con poco espacio o para moverla entre distintas habitaciones. Su diseño blanco y minimalista se integra bien en cualquier espacio.
La Xbox Series X es más grande, robusta y pesada. Su diseño vertical permite una mejor circulación de aire gracias al sistema de refrigeración interna, que trabaja de forma silenciosa incluso durante sesiones largas. Aunque es menos portátil, ofrece mayor estabilidad térmica.
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¿Cuál es mejor según tu tipo de jugador?
La respuesta a cual es mejor, Xbox Series S o Xbox Series X, depende de tus necesidades:
Elige Series X si:
- Tienes una televisión 4K y quieres aprovecharla al máximo.
- Eres exigente con la calidad visual, especialmente en efectos como iluminación, sombras y texturas.
- Sueles comprar juegos físicos y quieres aprovechar la compatibilidad del lector.
- Te interesa instalar muchos títulos sin preocuparte tanto por el espacio.
Elige Series S si:
- Tu presupuesto es limitado, pero quieres una consola de nueva generación.
- Juegas en pantallas Full HD o 1440p, donde la diferencia con la Series X se reduce.
- Prefieres descargas digitales y no usas discos.
- Quieres una consola compacta o fácil de transportar.
Ambas comparten acceso a Xbox Game Pass, retrocompatibilidad con juegos de generaciones anteriores, audio espacial y la posibilidad de alcanzar hasta 120 fps en juegos compatibles.
Precio y valor por tu dinero
Para muchos jugadores, un punto decisivo es el precio. La Series S es considerablemente más económica y sigue ofreciendo funciones de nueva generación. Esto la convierte en una gran opción para quienes buscan rendimiento sólido sin invertir demasiado.
Si te preguntas cuánto cuesta la Xbox Series X, generalmente es la más cara de la línea, pero también la que ofrece el mejor rendimiento general, mayor almacenamiento y lector de discos. A largo plazo, puede resultar más conveniente si compras muchos juegos físicos o buscas la mejor calidad visual disponible.
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Decidir que Xbox es mejor Series S o X depende de tu presupuesto, tu televisor y el tipo de experiencia que buscas. La Series X es la opción más completa para quienes desean jugar en 4K con el máximo rendimiento.
Por su parte, la Series S ofrece una entrada más accesible a la nueva generación con excelente desempeño en 1080p o 1440p. Cualquiera que elijas, ambas te conectan al mismo catálogo, servicios y ecosistema de Microsoft.