En Japón acaban de romper el récord mundial de velocidad de Internet y no lo superaron por poco. De hecho gracias a su ingenioso método, los científicos del país de oriente consigueron transmitir 319 Terabytes de información en solo un segundo, duplicando la velocidad máxima que habíamos alcanzado en 2020.

Lo mejor de la nueva marca es que no se utilizaron nuevos sistemas de transferencia complejos y futuristas. Estos 319 Terabytes de información se transmitieron a través de la tecnología de la fibra óptica que ya conocemos, pero modificaron las hebras que las componen por unas experimentales que contienen cuatro núcleos (las normales solo tienen un núcleo).

Sin entrar en detalles tan técnicos, la información fue enviada a través de estos cuatro núcleos y en forma de múltiples longitudes de onda. Los datos fueron impulsados por “amplificadores” especiales compuestos de tulio y erbio, elementos raros de nuestro planeta que son perfectos para potenciar la tecnología de la fibra óptica.

El experimento concluyó que se podría llegar a esta velocidad hasta en 3 mil kilómetros. Es un proceso muy costoso, pero podría ser aplicado en instalaciones gubernamentales como un canal de emergencia. Después de todo, estamos hablando de 320 Terabytes, una cantidad de información que por ahora nos parece astronómica.

El récord anterior de velocidad de Internet fue alcanzado en Inglaterra con 178 Tb/s y antes de eso, lo máximo en transmisión era de 44.2 Tb/s. Para que te des una idea, la conexión de la NASA es de 500 Gb/s y en países con mejor cobertura de internet, la velocidad apenas raya en los 10 Gb/s. En latinoamérica las velocidades fluctuan entre los 30 Mb/s y 1 Gb/s. ¿A cuánta velocidad navegas en tu casa?

Japón recalca que lo mejor de este nuevo sistema de conexión a internet es que ocupa la infraestructura actual, por lo que solo sería cuestión de adaptar las rutas que más le interesen al gobierno, o al sector privado. ¿Cómo vés? ¿Cuántas películas descargarías con semejante velocidad de conexión?