El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó una nueva orden ejecutiva para extender por 90 días el plazo dado a TikTok para desvincularse de su empresa matriz china, ByteDance, y así poder seguir operando legalmente en territorio estadounidense.
El anuncio fue realizado por el propio mandatario a través de su red Truth Social: “Acabo de firmar la orden ejecutiva por la que se prolonga el plazo para el cierre de TikTok 90 días (hasta el 17 de septiembre de 2025). ¡Gracias por su atención en esta cuestión!”, escribió.
Con esta prórroga, es la tercera vez que la administración Trump concede una extensión a la plataforma de videos cortos, luego de que no se lograran acuerdos definitivos con empresas estadounidenses para transferir su propiedad.
Según el documento oficial, durante este nuevo periodo no se impondrán sanciones ni se tomarán acciones legales contra TikTok o sus usuarios, en tanto se continúe avanzando en una solución que cumpla con la Ley de Protección contra Aplicaciones Controladas por Adversarios Extranjeros, que rige desde la anterior administración.
La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, adelantó días antes que la extensión estaba en camino, afirmando que el presidente “no desea que TikTok desaparezca” y que esta prórroga permitirá garantizar un acuerdo que preserve el acceso de los ciudadanos a la aplicación, sin poner en riesgo la seguridad nacional ni los datos personales.
Cabe recordar que Trump ha expresado en distintas ocasiones su simpatía por TikTok, incluso asegurando que fue clave para aumentar su popularidad entre los jóvenes durante las elecciones pasadas. “Tengo un punto débil con TikTok”, ha declarado el mandatario.
Durante el gobierno de Joe Biden, el Congreso intentó imponer un límite definitivo al vínculo de TikTok con empresas chinas, estableciendo como fecha límite el 20 de enero de 2025. Sin embargo, tras su regreso a la Casa Blanca, Trump revocó ese plazo y otorgó dos extensiones anteriores: una de 75 días en su primer día de gobierno, y otra en abril pasado.
Mientras las negociaciones continúan, TikTok sigue operando con normalidad, pero bajo una constante lupa regulatoria, en medio de un clima tenso entre Washington y Pekín por el control de los datos digitales.