El cibercrimen está en auge y es por ello por lo que se necesitan nuevas formas de combatir este tipo de ataques. Por esta razón la Agencia de Ciberseguridad y Seguridad de las Infraestructuras (CISA), en colaboración con el Ministerio del Interior de España y el Departamento de Estado de Estados Unidos, ha anunciado que están trabajando en un proyecto conjunto para desarrollar herramientas capaces de detectar y acabar con el ransomware.
El malware de rescate, conocido popularmente como ransomeware, consiste en un ataque que hace que el usuario no pueda acceder a su sistema o a sus archivos personales, porque un ciberdelincuente se los ha “secuestrado”. Normalmente el hacker pide un rescate para que se puedan recuperar estos datos y los equipos se suelen infectar a través de algún tipo de spam.
Este es un problema que afecta a tanto las grandes empresas como a individuos, y es por ello que durante la Segunda Cumbre Internacional de la Iniciativa contra el ransomware (CRI) celebrada en Washington (EEUU) se ha presentado este nuevo proyecto liderado por el Grupo de Trabajo de la Asociación Público-Privada (P3) de la CRI, que está presidido en nuestro paÃs.
La CRI es una alianza de 36 paÃses de todo el mundo y la Unión Europea que busca hacer frente a todo tipo de ataques por ransomeware. El objetivo de este proyecto es que las asociaciones privadas y públicas trabajen de la mano para poder combatir y encontrar soluciones a este tipo de ciberataque.
Aprender los unos de los otros -sector público y privado por igual- y compartir ese conocimiento de forma más amplia. Asà podemos proteger eficazmente las infraestructuras crÃticas necesarias para sostener no solo a la sociedad estadounidense, sino a las instituciones y redes mundiales en las que se apoya.” ha explicado Brandon Wales, director ejecutivo de CISA.
Este proyecto básicamente va a unificar todas las técnicas que tanto las asociaciones públicas y privadas han utilizado en el pasado para eliminar o bloquear el ransomware en el pasado para ponerlas en común y que todos los miembros del CRI puedan acceder a ellas y utilizarlas y asà evitar seguir sufriendo las consecuencias de estos ataques.