Elon Musk, quien fue co-fundador de OpenAI, presentó una demanda ante el Tribunal Superior de San Francisco contra dicha empresa y a su CEO, Sam Altman, por lo que, según él, es una traición a los objetivos fundacionales del fabricante de ChatGPT de beneficiar a la humanidad en lugar de buscar ganancias.
Musk aseguró que cuando financió la creación de OpenAI, consiguió un acuerdo con Altman y Greg Brockman, el presidente, para mantener a la empresa de IA como una organización sin fines de lucro que desarrollaría tecnología para el beneficio de la sociedad.
Al favorecer una relación estrecha con Microsoft, OpenAI y sus altos ejecutivos están “pervirtiendo” la misión de la compañía, alegó Musk en la demanda.
Cabe recordar que, actualmente, Musk ya no tiene ninguna participación en la empresa desarrolladora de inteligencia artificial.
Dicha demanda, presentada por Musk el 29 de febrero, señala que “OpenAI se ha transformado en una subsidiaria de facto de código cerrado de la empresa de tecnología más grande del mundo: Microsoft”.
Según su acuerdo fundacional, OpenAI también se comprometió a que su código fuera abierto al público en lugar de bloquearlo para las ganancias de cualquier empresa privada, dice la demanda.
“Bajo su nueva Junta, no solo está desarrollando sino que en realidad está refinando una Inteligencia Artificial General (IAG) para maximizar las ganancias de Microsoft, en lugar de hacerlo en beneficio de la humanidad”, criticó.
Musk demandó por incumplimiento de contrato, incumplimiento de deber fiduciario y prácticas comerciales desleales. También quiere una orden judicial para impedir que nadie, incluido Microsoft, se beneficie de la tecnología de OpenAI.