El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, negoció por meses con otras capitales europeas para tomar este paso; reiteró “su apoyo la solución de los dos Estados”.
La tensión crece en muchos campus de las universidades de Estados Unidos, donde arrecian las manifestaciones propalestinas y el discurso antisemita, que ha generado dimisiones de rectores.
“Recemos por la paz en Tierra Santa para que las controversias se resuelvan a través del diálogo y la negociación, y no por una montaña de muertos de uno y otro lado”, dijo el sumo pontífice.
El jefe de la ONU pidió un alto al fuego inmediato entre Israel y Hamas, sobre todo ahora que se dio el bombardeo en contra de un hospital en Gaza en donde fallecieron alrededor de 800 personas.