Las jugadoras del Chelsea femenino dejarán de firmar autógrafos y de hacerse fotografías con los aficionados antes y después de los partidos por la falta de seguridad tanto para las futbolistas como para los propios fans.
El cuadro londinense estaría dispuesto a pagar 50 millones de euros por el seleccionado mexicano, que también figura en los planes del Arsenal, Newcastle y Everton.