Hasta el 14 de noviembre, el Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica, se han confirmado 456 casos de otros virus respiratorios, siendo el VSR responsable del 63% de estos casos, alarmantemente el 94% de los casos el requieres hospitalización en niños menores de 2 años, lo que resalta la importancia de la atención médica.

La transmisión ocurre por gotas respiratorias y contacto con superficies contaminadas, los síntomas incluyen rinorrea, tos, fiebre, sibilancia, la infección puede propagarse incluso antes de que aparezcan síntomas algunos pacientes pueden seguir siendo contagiosos hasta 4 semanas después.

Aunque en su mayoría esta infección se resuelve por sí sola, los casos graves pueden llevar a complicaciones como bronquitis y neumonía, los Centros de Control de Prevención de Enfermedades de Estados Unidos desaconsejan el uso rutinario de antivirales, recomendado medicamentos sin receta para controlar fiebre y dolor, bajo la supervisión médica.

Esta enfermedad, es un virus que muta rápidamente lo que puede contribuir a su rápida propagación, además de presentar síntomas similares al resfriado, representa una amenaza particular para los lactantes siendo la principal causa viral de hospitalización en este grupo a nivel mundial.

Es importante destacar la atención médica especialmente en los grupos de mayor riesgo, en este caso sería como bebés, niños pequeños y adultos mayores, la prevención es la hidratación adecuada y la consulta médica ante cualquier síntoma son clave en el manejo de esta infección respiratoria.