En la actualidad, se encuentra muy en boga el consumo de agua alcalina. A la misma se le atribuyen diversas propiedades y grandes beneficios para la salud. En tal sentido, se afirma que es antioxidante, que puede reducir el envejecimiento prematuro, prevenir infecciones, ayudar a bajar de peso y hasta combatir el cáncer.
Pero ¿qué hay de cierto en todo esto? A continuación, conoceremos un poco más sobre qué es el agua alcalina, cómo se hace y, sobre todo, cuál es la fundamentación científica de todas estas supuestas virtudes.
¿Qué es el agua alcalina?
Según el nivel del pH (potencial de Hidrógeno), una sustancia o una solución serán consideradas más ácidas o más alcalinas. La escala que se utiliza al respecto va del 0 al 14, donde 0 sería el mayor grado de acidez y 14, de alcalinidad.
Ahora bien, el nivel del pH del agua que consumimos normalmente está en 7, o alrededor de esta medida. Se considera, por tanto, que el agua tiene un pH neutro. Esta medida puede variar un poco, dependiendo de la presencia de minerales y de otras sustancias usadas o aplicadas para su tratamiento, de acuerdo con diferentes fines.
En este orden de ideas, se define al agua alcalina como aquella que tiene un pH más alto. Puede tratarse de una que proviene de manantiales o puede haber sido modificada intencionalmente para elevar dicho nivel.
Dependiendo del fabricante y de las sustancias empleadas en el procesamiento, este nivel puede oscilar desde 7,1 a 8 e, incluso, más. En algunas marcas, así como en las naturales, alcanza hasta 9,5.
Cómo se hace el agua alcalina
Hay que aclarar que se puede encontrar agua alcalina natural. Esto ocurre cuando los manantiales pasan sobre rocas, recogiendo minerales, lo que cambia el pH.
Hay muchos lugares en el mundo donde esto ocurre. Por ejemplo, en una investigación se analizan muestras provenientes del Niágara y de las islas Fiji. También, son muy conocidas las de la Gruta de Massabielle, en el Santuario de Lourdes (Altos Pirineos, Francia).
Sin embargo, la mayoría de las personas consumen agua alcalina que han comprado ya embotellada o que han procesado en sus hogares mediante un dispositivo. En ambos casos, ha pasado por un proceso conocido como electrólisis.
A tales fines, se utiliza un ionizador, que eleva el pH del agua. Se asegura que esto permite separar las moléculas alcalinas y ácidas. Luego, estas últimas se canalizan y se desechan.
Adicionalmente, dado que el pH por sí solo no se considera suficiente, se añaden minerales alcalinos y se eleva el potencial oxidación-reducción negativo (ORP), el cual tiene que ver con la capacidad pro o antioxidante del agua.
Fabricación casera
También, es posible hacer agua alcalina en casa. Al respecto, se mencionan varios métodos. Entre ellos, destacan los siguientes:
Posibles beneficios del agua alcalina
Aunque existen dudas, discrepancias y controversias al respecto, hay quienes consideran que son variados los beneficios del agua alcalina para el organismo. Entre estos, se mencionan los siguientes.
Adiós fatiga con el agua alcalina
Por supuesto, el agua hidrata, pero debemos recordar que la hidratación también tiene que ver con la reposición de electrólitos. Al contener más minerales, algunas aguas alcalinas podrían ayudar a cumplir mejor esta función, reduciendo además la fatiga.
Propiedades antioxidantes
Si bien no hay evidencia científica, se piensa que, por sus propiedades antioxidantes, podría ayudar a reducir el efecto de los radicales libres, combatiendo el envejecimiento prematuro.
Cuidado de la piel con agua alcalina
En el mismo orden de ideas, otro de los beneficios atribuidos al agua alcalina es que contribuye con el cuidado de la piel, manteniéndola hidratada y con buena elasticidad, y mejorando su aspecto general.
Depurativo
También, se afirma que permite eliminar toxinas y diversas sustancias de desecho a través de la orina de una manera más eficiente, lo que ayudaría a mantener la salud de los órganos.
Bajar de peso al beber agua alcalina
Se considera que el consumo moderado de agua alcalina puede ayudar a bajar de peso de manera saludable, contribuyendo con la mejora de problemas como la retención de líquidos.
Combatir el cáncer
Comúnmente, se relaciona la acidez corporal con la aparición de diversas enfermedades, incluyendo el desarrollo de neoplasmas. Por ello, se reflexiona que se podría prevenir el cáncer con el agua alcalina. Los datos al respecto no son concluyentes.
Disminuir infecciones
Se asocia un pH ácido con la predisposición a contraer infecciones vaginales y urinarias, entre otras. No obstante, si se redujese esta acidez o si se elevase la alcalinidad, debería disminuir la propensión o la susceptibilidad a sufrir el ataque de microorganismos patógenos, tales como virus y bacterias.
¿Funciona realmente el agua alcalina?
Como se señaló al inicio, se han puesto en tela de juicio los beneficios para la salud derivados del uso del agua alcalina. Analicemos lo que dicen los estudios realizados sobre el tema.
Reflujo gástrico: en un estudio in vitro se encontró que el agua alcalina carbonatada de manera natural y de pozo artesiano, con un pH de 8,8, podría desactivar la pepsina, que es la principal causante del reflujo.
Estreñimiento: los resultados de una investigación efectuada en Japón en 2018 sugieren que el agua alcalina electrolizada podría mejorar el flujo y la frecuencia de evacuación de las heces.
Viscosidad de la sangre: en otro estudio, se encontró una diferencia significativa en la viscosidad de la sangre al consumir agua con un pH más alto, después de una sesión de entrenamiento extenuante.
Obesidad: en un estudio de laboratorio, hecho con ratas con obesidad inducida, se observó un efecto positivo, mejorando la adiposidad, el aumento de peso y la acumulación de grasas en el epidídimo y en el hígado.
Trastornos posmenopáusicos: por último, en una investigación reciente se determinó un menor riesgo metabólico, así como una mejora de la calidad del sueño y la fuerza muscular en mujeres posmenopáusicas.
Sin embargo, pese a estos resultados, se considera que para poder generalizar, se necesita más investigación, dado que estos datos pertenecen a pequeños estudios, algunos realizados in vitro o, incluso, con animales.
Efectos secundarios y contraindicaciones
Actualmente, no hay reportes de casos ni evidencias que demuestren algún efecto secundario no deseado. Por ende, mientras sea tratada adecuadamente, el agua alcalina es segura para la salud. Tampoco se señalan limitaciones con respecto a la cantidad a consumir.
No obstante, se deben tomar precauciones con respecto a la calidad de la fuente original, en cuanto a elementos contaminantes (sobre todo químicos), y agregar minerales. Sobre esto, en los estudios se mencionan posibles riesgos del consumo de agua pobre en minerales, sobre todo calcio y magnesio.
Calidad de vida y calidad del agua
El cuestionamiento que se hace en relación con el agua alcalina no tiene que ver con su seguridad, sino que a menudo las afirmaciones sobre sus bondades para la salud pueden parecer exageradas.
En tal sentido, se debe advertir acerca de los riesgos en los que se podría incurrir si se obviasen los tratamientos médicos, pensando que por sí sola esta agua puede hacer el milagro de curar enfermedades.
Por lo tanto, se debe enfatizar que su consumo debe hacerse en el marco un estilo de vida saludable, incluyendo una alimentación sana, una rutina de ejercicios regular y evitando el consumo de cigarrillos, así como el exceso de alcohol, entre otras medidas.