La alergia estacional es producida por la exposición a sustancias suspendidas en el aire, como el polen, que aparecen durante ciertas épocas del año. Estas son especialmente habituales en primavera, verano u otoño, según la sustancia que cause la alergia. Además, se puede tener alergia a uno o más tipos de polen.

Asimismo, las esporas de hongos presentes en el aire durante largos períodos también pueden generarla. ¿Te interesa saber más al respecto? ¡Sigue leyendo que te lo contaremos todo!

Síntomas de las alergias estacionales

Las alergias estacionales suelen producir los siguientes síntomas. Estos, a su vez, pueden variar de persona a persona, según sea su estado de salud y estilo de vida.

Congestión.
Mucosidad.
Secreción nasal.
Inflamación nasal.
Picazón en los ojos.
Estornudos, enrojecimiento.

Si sospechas que estos síntomas coinciden con algún malestar que tengas, lo mejor es que acudas a tu médico de confianza para averiguar si trata de alergia estacional. Y en caso de que así sea, debes tener en cuenta que:

El sistema inmunitario está respondiendo a algo que hay en el medio ambiente. Es una sustancia extraña que puede entrar en el cuerpo y desencadenar una respuesta inmunitaria.

Todo el organismo está protegido por el sistema inmunitario, en especial el aparato digestivo. Esto sucede por que el cuerpo interactúa con el mundo exterior, tomando nutrientes de los alimentos y manteniendo fuera las bacterias, los patógenos y los alimentos no digeridos.

Un sistema inmunitario estimulado se vuelve muy sensible a los alérgenos estacionales, y tu respuesta se manifiesta en esos síntomas.

En esta etapa podría ser buena idea hacer una dieta -según las pautas del médico-, para evitar aquellos alimentos que intensifiquen las molestias. Esto deberá hacerse solo por un periodo de tiempo concreto, que puede ser de durante unas pocas semanas o menos.

Si los síntomas no mejoran después de eliminar ciertos alimentos, los puedes volver a añadir, si tu médico así lo autoriza.

En cambio, si tras haberlos eliminado de la dieta mejoras, entonces, es probable que seas sensible a esos alimentos, y que debas restringir su consumo.

Reorganiza tu dieta con los primeros síntomas de la alergia estacional

Aunque no existe una dieta específica para aliviar los síntomas de todos los pacientes por igual, hay alimentos recomendables en muchos casos, puesto que actúan, en cierto modo, como antialérgicos.

Son los que contienen nutrientes naturales, como vitamina C o ácido fólico, que junto con un tratamiento médico adecuado y un estilo de vida saludable, ayudan a disminuir los síntomas. Por eso es importante tenerlos en cuenta y añadirlos a la alimentación regularmente.

Incluye alimentos con altas concentraciones de vitamina C

En una revisión reciente, se expone que “Hemilä H explica que sí tenemos evidencias de que el micronutriente acorta la duración de los resfriados y alivia sus síntomas”. Por ende, podría resultar útil a la hora de aliviar el malestar que producen las alergias estacionales.

Puedes encontrar fuentes de vitamina C en alimentos como:

Kiwi.
Berros.
Brócoli.
Coliflor.
Repollo.
Espinaca.
Naranja y limón.
Zapallo italiano.

Alimentos que contienen concentraciones de ácido fólico

De acuerdo con una publicación del Journal of Allergy and Clinical Immunology, el ácido fólico podría resultar clave para disminuir los síntomas de las alergias y controlar los casos asma. Este nutriente, además, es esencial para una adecuada producción de glóbulos rojos.

Por eso, lo más conveniente es asegurar una adecuada absorción de este nutriente en la dieta. Incluso, si el médico lo considera, podría obtenerse a través de suplementos.

Entre los alimentos que nos aportan mayores cantidades de ácido fólico encontramos:

Habas.
Arvejas.
Castañas.
Lechuga.
Lentejas.
Garbanzos.
Espinacas
Espárragos.

Alimentos con flavonoides

Se considera que es recomendable incorporar a la dieta alimentos con flavonoides, en especial, quercetina, ya que es una sustancia que tiene efecto antialérgico.

Ajos.
Peras.
Avena.
Cerezas.
Mangos.
Cebollas.
Manzanas.

La dieta debe ser rica en frutas y verduras, e incorporar un consumo periódico de legumbres. Por esto, se deben incluir diariamente 3 porciones de verduras y 2 de frutas, según el listado y las recomendaciones del médico tratante.

Características de la dieta para evitar la alergia estacional
Tomar alimentos probióticos, como el yogur.
Comer 5 raciones de fruta y verdura al día.
Aumentar el consumo de pescados azules y huevos.
Aumentar alimentos ricos en ácidos grasos omega 3 y vitamina C.
Preparar infusión de té verde, ya que actúa también como antioxidante.
Equilibrar el consumo de grasas ácidas (reducir la ingesta de aceite de girasol y otras semillas, y optar por el aceite de oliva).

Vitaminas y minerales que no pueden faltar

Vitamina E y C

Tanto la vitamina C como la E son necesarias para la salud de todo el organismo. Por ello mismo, no deben faltar fuentes que las incluyan en la dieta. Algunas de las más recomendables serían las siguientes:

Soja.
Frutos secos.
Aceites vegetales.
Cereales integrales.
Verduras y hortalizas de hoja verde.

Betacaroteno

El betacaroteno es un pigmento localizado en todos los vegetales de color amarillo y naranja. Además es un gran antioxidante, el cual nos ayudará a mantenernos sanos y proteger los tejidos. Se encuentra en: zanahorias, calabaza, mango, albaricoques.

Una vez en el organismo, el betacaroteno se transforma en vitamina A, fundamental para proteger las membranas mucosas y reparar las membranas respiratorias.

Magnesio

El magnesio es un oligoelemento necesario para la salud. Además tiene propiedades antiinflamtorias, las cuales pueden ayudarnos en los casos de alergia estacional. Lo encontramos en mayor concentración en los frutos secos.

Alimentos y especias picantes

Según algunas creencias, los alimentos y especias picantes te pueden ayudar a abrir las fosas nasales y reducir la congestión temporalmente. Esto quiere decir que son complementos naturales que pueden utilizarse para aliviar algunos de los síntomas de la alergia estacional.

Su consumo y cantidades dependerán de tu tolerancia frente a las comidas picantes, y las recomendaciones de tu médico:

Wasabi.
Rábanos.
Cúrcuma.
Jengibre.
Mostaza de Dijon.
Pimientos picantes.

También contienen un compuesto químico natural llamado capsaicina, que ayuda a expulsar los alérgenos a través del sudor y los estornudos. Por todo esto pueden ser efectivos para aliviar la congestión y reducir la inflamación.

Cúrcuma

La cúrcuma es una especia de color amarillo que destaca por su contenido de curcumina, un activo con gran capacidad antioxidante y antiinflamatoria. Se ha utilizado con diversos fines medicinales desde la antigüedad, sobre todo, en la India y Asia.

Se considera que puede funcionar como descongestionante para aliviar la reacción alérgica. Por todo esto, puedes realizar la siguiente preparación para beneficiarte con la cúrcuma.

Ingredientes
1 cucharada de cúrcuma en polvo (10 g).
1 vaso de leche (200 ml).
Preparación
Primero, calienta el vaso de leche y añade la cúrcuma en polvo.
Después,mezcla bien y bebe una vez al día para aliviar los síntomas de la alergia.

Jengibre
El jengibre es una raíz que también ha tenido aplicaciones medicinales varias desde hace milenios. Hoy en día, sabemos que contiene gingerol y otras sustancias que le confieren propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Por ello, podría ayudar a despejar las vías respiratorias y a prevenir y aliviar los síntomas del asma.

Ingredientes
1 taza de agua
1 cucharadita de jengibre molido (10 g) o 4 rodajitas finas de la raíz
Preparación
Primero, calienta una taza de agua y, cuando llegue a ebullición, añade el jengibre (en la forma que prefieras).
Después, deja que infusione durante 5 minutos, cuela y bebe.
Puedes tomar hasta dos tazas al día para aliviar la congestión.

Si tu médico te autoriza a utilizar alguna de las opciones que te hemos señalado, sigue sus recomendaciones para hacer un buen uso de ellas. Aparte, procura mantener buenos hábitos de vida para que puedas recuperarte y recuperar tu bienestar.