Esta tradición viene desde España y afirman que viene desde 1909, cuando una abundante cosecha de uvas se dio y los productores deshicieron promocionar paquetes de 12 uvas como “uvas de la suerte” en representación de todos los meses del año diciéndole a la gente que si los comían tendrían suerte todo el siguente año.

Desde entonces, muchas personas comenzaron a llevar a cabo el ritual de comer 12 uvas justo a la media noche cada Año Nuevo, ya que esta fruta representa la esperanza y buena suerte para cada mes del siguiente año.

Según la tradición, cuando da la media noche, las personas toman las 12 uvas y se las comen pensando en un deseo o propósito con cada una de ellas pensando que eso les traerá suerte y posibilidades de lograrlo.

No se sabe si esta tradición tenga o no efecto pero se sabe que es uno de los rituales con más antigüedad y que se repite año tras año en España, Argentina, México, Venezuela, Ecuador, Perú, Chile, Colombia, entre otros países.