Cinco pasos para cuidar una orquÃdea en casa:
Además de su función decorativa , que sin lugar a dudas es esencial para mantener tu hogar luminoso y fresco, las plantas limpian el ambiente mejoran y purifican el aire. Además transmiten bienestar, tranquilidad y alegrÃa haciendo asà que los espacios sean más equilibrados y serenos, por eso es indispensable cuidarlas de forma correcta y considerarlas como protagonistas de la decoración.
Replanta tu orquÃdea
Seguramente cuando la compres venga en contenedores de plástico y no en macetas adecuadas, dejando las raÃces comprimidas. Si este es el caso, debes replantar la orquÃdea. Es importante que haya flujo de aire alrededor de las raÃces, asà vas a permitir que la planta crezca fuerte y sana.
¿Cuál es el espacio perfecto?
Busca un rincón de la casa que tenga buena iluminación, si puede ser cerca de la ventana mejor pues el acceso a la luz es muy importante para cautivar este tipo de planta exótica. Además estos lugares no suelen estar decorados, por lo que la orquÃdea podrá cumplir con su función y volverse la protagonista.
Agua baja en minerales para regarla
Si la orquÃdea se encuentra en perÃodo de floración, es importante que riegues una vez a la semana, esto para dejar que el agua se escurra en la maceta y evitar que se estanque. Si no está floreciendo, puedes regarla cada dos o tres semanas pues en este periodo requiere de menos agua para sobrevivir.
Abona la planta
Puedes encontrar el abono indicado para hacerlo en cualquier florerÃa, es importante que no lo dejes de lado pues este fertilizante contiene las vitaminas y nutrientes necesarios para su correcto crecimiento, es recomendable añadirlo al agua de riego.
Temperatura y otros cuidados
Al ser una planta exótica no resisten el frÃo, por lo que la temperatura indicada es mÃnima de nuevos grados y máxima de 30. Si tu orquÃdea deja de florecer, significa que llegó la hora de cortar el tallo, es importante hacerlo antes de que se ponga amarillo. Trata de cortar a un centÃmetro del primer rebrote que esté visible y no olvides moverla de maceta cada dos años siempre manteniéndola lejos de los insectos.