Ingredientes:

-2 tazas de harina de maíz para tortillas (masa de maíz nixtamalizado)

-1 ½ tazas de agua tibia

-Una pizca de sal (opcional)

Utensilios necesarios:

-Un tazón grande

-Un comal o sartén antiadherente

Instrucciones:

-En el tazón grande, coloca la harina de maíz para tortillas. Si deseas, añade una pizca de sal para realzar el sabor de las tortillas.

-Agrega gradualmente el agua tibia a la harina de maíz. Con una mano, mezcla los ingredientes y, con la otra, amasa la masa para integrar todo de manera uniforme. La consistencia ideal de la masa debe ser suave y homogénea, sin estar ni demasiado seca ni demasiado pegajosa. Si la masa está muy seca, añade un poco más de agua; si está muy pegajosa, agrega un poco más de harina.

-Divide la masa en pequeñas porciones, aproximadamente del tamaño de una nuez, y forma bolas con las manos.

-En una superficie ligeramente enharinada, coloca una de las bolas de masa y presiónala con la palma de la mano para formar un disco. Usa tus dedos para extender el disco hasta obtener una tortilla del tamaño deseado. Si es tu primera vez haciendo tortillas, es posible que necesites practicar para lograr la forma y el grosor adecuados.

-Calienta un comal o sartén antiadherente a fuego medio-alto. No es necesario agregar aceite ni mantequilla, ya que las tortillas se cocinan sin grasa.

-Coloca una de las tortillas en el comal caliente y cocina durante aproximadamente 1-2 minutos por cada lado. Notarás que aparecen pequeñas burbujas en la superficie de la tortilla y los bordes se levantan ligeramente cuando es hora de voltearla.

-Gira la tortilla y cocina el otro lado por el mismo tiempo, hasta que esté cocida y ligeramente dorada.

-Retira la tortilla del comal y colócala en un plato cubierto con un paño de cocina limpio para mantenerla caliente y suave. Continúa con el resto de las bolas de masa hasta haber hecho todas las tortillas.