Como medio de prevención y un ensayo para actuar correctamente ante algún siniestro, el Gobierno Municipal por medio de la Dirección de Protección Civil y Bomberos (PCYB), se sumó al Segundo Simulacro Nacional 2023 en el que, por parte de Nuevo Laredo, participaron alrededor de 700 personas entre empleados municipales y ciudadanos.
El director de PCYB, Humberto Fernández Diez de Pinos, detalló que el simulacro se trató como un incendio y se realizó en cinco edificios municipales como la Presidencia, el Anexo, Centro Cívico, entre otros.
“La importancia de los simulacros es para detectar deficiencias y áreas de oportunidad para la próxima vez hacer un mejor trabajo, estos ejercicios son para prevenir y medir nuestras acciones porque en un siniestro real tenemos que actuar con un margen cero de error”, destacó.
Informó que las anomalías detectadas en el simulacro de abril fueron resueltas y que el equipo de brigadistas y bomberos actuó adecuadamente.
Al finalizar el simulacro, bomberos, oficiales, paramédicos, trabajadores municipales y ciudadanía en general, alzaron el puño derecho como un homenaje a todas las víctimas de fenómenos naturales que se han presentado en el país.
El primer Simulacro Nacional del 2023 se realizó el 19 de abril y atendió un supuesto sismo o terremoto.