Altamira. – Ante la oleada de robos en las carreteras federales, lo operadores de unidades pesadas han optado por renunciar a sus empleos, lo que ocasiona un serio problema para las empresas dedicadas a la actividad.

Arturo Puente Vázquez, consejero nacional de la CONATRAM, manifestó que el temor de los choferes en ser atacados aumenta, por lo que ya no quieren viajar a ciertos Estados de la República.

Pues, la inseguridad en carreteras a nivel nacional y la frecuencia de los asaltos, han alcanzado niveles alarmantes, lo que ha llevado a muchos conductores de transporte de carga a tomar la difícil decisión de dejar sus puestos de trabajo.

Sobre el tema, el empresario transportista expuso quedurante el 2023, se registró la sustracción de 20 unidades, lo que equivale a un promedio de 6 millones de pesos en pérdidas por unidad, esto, sin contar el cargamento.

“En el último año, hemos batallado para poder conseguir operadores que desean trabajar nuestras unidades, ya que su mayoría sin importar el pago, han preferido buscar otros empleos menos peligrosos, aunque el sueldo sea mínimo”.

Todo ello ha ocasionado exista un déficit de operadores de hasta un 40 por ciento, provocando que en algunos casos, los propietarios de las unidades tengan que manejarlas para cumplir con la entrega de mercancía.