El Instituto de Previsión y Seguridad Social del Estado de Tamaulipas (IPSSET) enfrenta una situación financiera compleja.

Con una plantilla de más de 51 mil trabajadores activos en el gobierno estatal, el Instituto es el encargado de gestionar las pensiones de miles de empleados públicos, y a pesar de los esfuerzos realizados para alargar la suficiencia del fondo, la situación sigue siendo crítica.

En este contexto, María Luisa Manaotu, secretaria de Administración del Gobierno de Tamaulipas, explicó las medidas que se están tomando para garantizar que el instituto pueda cumplir con sus obligaciones a largo plazo.

“Pudimos ampliar el fondo de pensiones durante tres años más, lo que permitió una mayor suficiencia en los recursos. Sin embargo, debemos hacer más. Estamos trabajando con un actuario para explorar nuevas estrategias que nos permitan extender aún más este periodo de suficiencia”, indicó la funcionaria.

La extensión de tiempo fue posible gracias a un reajuste en la administración del fondo, pero la secretaria reconoció que se deben implementar nuevas medidas para asegurar su estabilidad financiera en el futuro.

Aunque se han realizado esfuerzos significativos para mejorar la administración de los recursos, la secretaria reconoció que la sostenibilidad del sistema de pensiones está directamente vinculada con el incremento de las aportaciones tanto del gobierno como de los trabajadores.

“Estamos evaluando diversas alternativas, pero aún no tenemos una solución definitiva. Las aportaciones adicionales son una posibilidad que estamos considerando”, comentó.