Altamira. – Después de las declaraciones de integrantes de la Unidad Agrícola Industrial de Mujeres sobre irregularidades al interior del ejido Benito Juárez, el comisariado Enrique Báez Nieto, rechazó tales acusaciones, además de asegurar que el Tribunal Agrario, resolvió en dos ocasiones a favor de los pobladores.

Sin duda, lamentó las declaraciones de las supuestas afectadas, pues, aseguró que desde que asumió el cargo, como comisariado buscó dialogar con las cuatro integrantes de dicha unidad, mismas que son familiares, pero, se negaron a ello, desconociendo las causas.

Explica que su carácter de presidente del comisariado, tiene la obligación de velar por el poblado y por ende, de sus intereses: “a mi me manda la asamblea para llevar a cabo los acuerdos que se tomen y uno de ellos, es contar con los locales”.

Dijo que los predios fueron solicitados por la organización de mujeres en comodato hace 20 años para sus diversas actividades, sin embargo, al no ponerse de acuerdo entre ellas, el grupo empezó a disolverse, quedando sólo cuatro personas.

Antes de ello, manifiesta, que la mayoría de las integrantes regresaron las instalaciones, causando el malestar de las ahora demandantes María Cristina Gallegos Cervantes y Esther Rodríguez Hernández: “no estuvieron de acuerdo y pusieron candados, apropiándose deliberadamente de los locales”.

Señala que las supuestas afectadas presentaron una demanda y un amparo, en ambos el Tribunal Agrario resolvió a favor de la asamblea, por ende, deben regresar los locales para las actividades propias del ejido, desde reuniones de trabajo, como de tipo educativo y cultural.

Deja en claro que las demandantes no son ejidatarias, por ende, están violentando la ley: “ellas se han beneficiado de todos los programas y apoyos que brinda el Gobierno, por ello, consideramos que es su malestar. Nosotros estamos cumpliendo con la ley Agraria”.