Científicos de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) trabajan en nuevas metodologías para generar energías alternativas que, además de ayudar al medioambiente, permitan el aprovechamiento de desechos industriales y agropecuarios.

Al participar en una nueva edición del programa “ConectadODS”, que realiza el Comité para el Desarrollo Sustentable de la UAT, la Dra. Gloria Sandoval Flores, coordinadora académica de la Maestría en Ingeniería en Gas y Petróleo de la Unidad Académica Multidisciplinaria Reynosa Aztlán, explicó la participación que tiene la Universidad en estudios e investigaciones en materia de energías alternativas.

Explicó que se está trabajando con empresas internacionales en la generación de biocombustibles como el biodiésel.
“Hay cultivos muy importantes en la zona norte del estado, a los cuales no se les ha dado el uso correcto; estamos tratando de plantear que puedan ser fuente de energía renovable”, apuntó.

Entre los proyectos científicos refirió también el trabajo para lograr el uso eficiente de la biomasa de desecho.
“Estamos trabajando con el proyecto de la cáscara de naranja. Anteriormente trabajamos con la naranja agria; hicimos un absorbente natural para metales pesados, que se está ofreciendo a las empresas maquiladoras que tienen desechos con residuos de metales”, explicó.

Destacó la vinculación que se tiene con organismos del sector energético: “Tenemos convenios con el sector de hidrocarburos, con Petróleos Mexicanos, con algunas compañías perforadoras. Se nos pide el conocimiento y el asesoramiento para la mejora y el uso de la energía”.

“No solo estamos en búsqueda de nuevas fuentes de energía, que es el objetivo, sino también del uso responsable de alternativas como el gas natural”, agregó.

Dijo que se ha participado con las compañías de perforación en la creación de metodologías para el tratamiento de fluidos, a fin de recuperar el agua que se obtiene de las perforaciones, pues, al utilizarse un fluido base aceite, el agua sale contaminada; de modo que es necesario quitarle esos residuos para hacer un uso eficiente del recurso. Dichas metodologías se encuentran actualmente en proceso de patente.

La ponencia virtual se dio en el marco del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) No. 7: Energía asequible y no contaminante, que plantea la Organización de las Naciones Unidas en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, y que se destaca por buscar garantizar el cuidado del planeta y de los recursos naturales, así como aumentar considerablemente la proporción de energía renovable en el conjunto de fuentes energéticas, con el objetivo de duplicar al año 2030 la tasa mundial de mejora de la eficiencia energética.