MADERO. – Debido a que carecen de recursos por la falta de estudiantes en más escuelas, concesionarios han empezado a comercializar sus vehículos y así sobrevivir a la crisis que enfrentan desde hace un año.
Héctor Maldonado Aquino, secretario general del Sindicato de Transporte Escolar en el Sur de Tamaulipas, reconoce la crisis que enfrentan a diario, tras la pandemia, pues no han podido trabajar, sin embargo, deben cubrir una serie de pagos desde mantenimiento, hasta personales.
Y es que, el pasado 6 de marzo se cumplió un año de que se suspendieron las clases presenciales, por lo que tuvieron que buscar otras alternativas para generar recursos para sus familias.
“Algunos concesionarios tuvieron un cambio drástico, se dedicaron a vender alimentos, a vender cubrebocas y todo eso porque necesitaban generar un ingreso y por su edad no se pudieron acomodar”.
Pero, el problema se recrudeció en los últimos meses, pues, las ventas tampoco son las suficientes, lo que motivo a que algunos optaron por comercializar sus unidades, ante la falta de servicio y altos costos de servicio.
Puntualizó que los concesionarios han optado por vender las unidades están buscando dedicarse a otra cosa, pues no ven un regreso a clases presenciales a corto plazo por la pandemia.