Concesionarios del transporte público desde la semana pasada comenzaron a realizar “paros escalonados” del servicio en protesta por la negativa del Estado por realizar un ajuste a la tarifa de los colectivos.

Los paros son ordenados por los propios delegados de ruta y se llevan a cabo de forma simulada de tres a cinco horas para evitar ser sancionados.

En Victoria hay en promedio en funcionamiento 14 rutas del transporte público con 280 microbuses de los 700 que había antes de la pandemia por Covid-19. Actualmente los choferes y concesionarios operan con un 42 por ciento de inflación, y costos de operación, donde una lata de aceite de 19 litros que costaba 300 pesos, hoy vale mil 500; las llantas pasaron de 9 mil pesos por 4, ahora sólo una cuesta 3 mil 800 pesos,

Cabe recordar que, desde hace 10 años, en Tamaulipas no se ha presentado un alza al pasaje del transporte público, situación que pone en jaque a los concesionarios, sin embargo, el titular de la Secretaría General de Gobierno, Héctor Joel Villegas González, insistió que las negociaciones continúan hasta encontrar un punto de equilibrio.

Informó que se continúa con el diálogo entre el Estado y los microbuseros y así seguirá hasta no llegar a un común acuerdo.

“Ya tuvimos una plática el día viernes con los compañeros y estamos en una mesa de trabajo y seguirnos en la mesa con ellos”, dijo. 

Sin embargo, el funcionario destacó que hasta que no exista un acuerdo que beneficie a ambas partes, no se podrá avanzar.

Cabe señalar que los transportistas piden un aumento, de hasta dos pesos, mismo que fue dado por la administración de Egidio Torre Cantú, hace ya 10 años.