Los meses de mayo a agosto representan el periodo más crítico del año para los restaurantes de Ciudad Victoria, debido al aumento considerable en el consumo de energía eléctrica, provocado por el uso constante de aires acondicionados ante las altas temperaturas.

Jesús Arnoldo Gómez González, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), explicó que durante el segundo y tercer trimestre del año los recibos de luz tienden a duplicarse, afectando directamente los costos de operación.

“Apenas vamos a empezar a ver los recibos elevados. Este y el próximo bimestre son los que más nos pegan por el consumo de energía eléctrica”, señaló.

El impacto varía según el tipo de establecimiento. Mientras que negocios al aire libre no enfrentan estos problemas, los que cuentan con áreas cerradas, terrazas climatizadas o salones de eventos registran un gasto mucho mayor.

“En muchos casos, la factura se dispara al doble”, indicó.

Para afrontar esta situación, que se repite cada año, los propietarios de restaurantes han implementado distintas estrategias. Algunos generan un fondo de ahorro durante el año, otros ajustan gastos en otras áreas o simplemente absorben el impacto económico con la esperanza de recuperarlo en meses posteriores.

“No se puede incrementar el precio de los menús nada más porque subió la facturación de luz. Eso tendría un fuerte impacto para los clientes”, reconoció Gómez González.

Aunque la instalación de paneles solares sería una opción viable a largo plazo para reducir el gasto de luz, no todos los negocios pueden aplicarla, ya que muchos operan en locales rentados. Ante esto, desde la Canirac se promueve el uso eficiente de la energía y el mantenimiento constante de los equipos.

“Recomendamos revisar que no haya cortos, apagar lo que no se utiliza, dar mantenimiento a hieleras, congeladores, campanas de grasa y aires acondicionados. El no hacerlo fuerza más a los equipos y eleva el consumo de luz”, advirtió.