Las detenciones arbitrarias cometidas por agentes de seguridad en contra de jóvenes de colonias vulnerables de Tamaulipas, siguen ocurriendo sin consecuencias claras para los responsables.

Así lo denunció Alejandro Reyes, Defensor de los Derechos Humanos de Naciones Unidas en Tamaulipas, quien advirtió que sólo se cumple un 10% de las recomendaciones emitidas por organismos defensores de derechos.

Reveló que actualmente existen al menos siete casos documentados en los que jóvenes fueron presuntamente detenidos sin causa legal.

“Son jóvenes de clase baja, sin acceso a defensa legal y sin nadie que los proteja. Por eso los detienen arbitrariamente, los revisan sin motivo, y de pronto aparecen en la Fiscalía acusados de delitos graves”, denunció.

El defensor señaló que, aunque existen agentes honestos, hay un sector importante, aproximadamente un 30% que participa activamente en estas prácticas ilegales.

Además, añadió que algunos agentes supuestamente, operan incluso como encubiertos y fuera de la ley, pero amparados por instituciones del Estado.

Afirmó que ya se ha entregado un informe detallado sobre esta problemática, resultado de entrevistas con 25 especialistas en detenciones arbitrarias, y pidió al nuevo secretario de Seguridad Pública en Tamaulipas, que atienda esta grave situación.

“Hacemos un llamado al General para que refuerce el respeto a los derechos humanos. La omisión de las autoridades es clara y las recomendaciones no se acatan”, recalcó.

Lamentó que muchas familias no denuncian por miedo a represalias, y subrayó que la Comisión de Derechos Humanos en México “se ha quedado sorda, muda y corta” ante este tipo de violaciones.

“Es preocupante que México siga permitiendo este patrón de detenciones arbitrarias. Las instituciones deben actuar ya, y dejar de ignorar las recomendaciones que buscan proteger a los más vulnerables”, concluyó.