El ex diputado local Ramiro Ramos Salinas, integrante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), cuestionó la política educativa federal al advertir que, pese al incremento en programas de becas, el país mantiene uno de los niveles más bajos de inversión directa en escuelas, infraestructura y remuneración docente.

El señalamiento se apoyó en datos de la OCDE, que ubican a México en el último lugar de gasto por estudiante de educación primaria entre los países evaluados. De acuerdo con la gráfica difundida por el propio organismo, México destina dos mil 933 dólares por alumno, cifra considerablemente menor al promedio de la OCDE, que supera los 11,900 dólares.

Ramos Salinas expuso que, aunque los apoyos sociales han aumentado, estos no han sido acompañados de una estrategia integral para fortalecer los planteles educativos ni mejorar la capacitación y condiciones laborales del magisterio.

“Las becas pueden ser un apoyo, pero no sustituyen la inversión en escuelas, equipamiento, tecnología ni salarios docentes”, señaló al subrayar la importancia de revisar la eficiencia del gasto público en materia educativa.

El ex legislador insistió en que la brecha con otros países refleja la urgencia de replantear la política de financiamiento educativo, colocando al aprendizaje y al desarrollo escolar como eje central.

La estadística internacional muestra una tendencia sostenida en la que México mantiene rezagos significativos frente a otras naciones, incluso dentro de América Latina y miembros de la Unión Europea.