Sí, las redes sociales pueden ser destructivas debido a sus efectos negativos en la salud mental, como la comparación social, la baja autoestima, el ciberacoso, la adicción y la difusión de información errónea.
Estos problemas pueden ser especialmente perjudiciales para los adolescentes, pero afectan a personas de todas las edades y en la política también son usadas.
La diputada Mercedes del Carmen Guillén Vicente llamó a la ciudadanía a utilizar las redes sociales con responsabilidad, al advertir que, aunque son una herramienta útil para la comunicación y la participación pública, también pueden convertirse en un instrumento destructivo cuando se emplean para difundir información falsa o afectar la reputación de las personas.
La legisladora destacó que el impacto negativo de las redes sociales puede reflejarse en la salud mental de los usuarios, generando baja autoestima, adicción, ciberacoso y desinformación, afectando no solo a jóvenes, sino también a adultos y actores políticos.
“Las redes pueden ser usadas para bien o para mal, como todos los instrumentos. No se trata de prohibirlas, porque todos tenemos derecho a opinar, pero debemos tener cuidado con su uso y con la información que compartimos”, señaló Guillén Vicente.
Finalmente, exhortó a los usuarios a verificar la veracidad de las noticias antes de compartirlas, promoviendo un entorno digital más responsable y constructivo. “Lo que siempre recomiendo es primero checar si la noticia es cierta”, puntualizó.