Victoria, Tamaulipas.- Ha pasado más de una semana desde que se hizo pública la denuncia sobre un presunto esquema de corrupción en la Secretaría de Salud de Tamaulipas.
Hasta el momento, ni Martín de Jesús Flores Rivera ni los funcionarios involucrados han dado una explicación convincente sobre el destino de los más de 300 millones de pesos adjudicados a la empresa MANIFLOSA S.A. de C.V. en un contrato exprés.
El escándalo estalló luego de que se revelara que el 27 de diciembre de 2024 se firmó un contrato por 309 millones 114 mil 353.58 pesos para el supuesto equipamiento de unidades médicas, y que apenas cuatro días después, el 31 de diciembre, se transfirieron 199 millones de pesos sin evidencia de entregas.
Dos días después, en respuesta, la Secretaría de Salud emitió un comunicado, en el que asegura que no ha recibido ninguna notificación formal de denuncia y que ha iniciado una revisión interna.
La Secretaria de Salud de Tamaulipas insiste en que no hay denuncias oficiales, pero la información filtrada y las pruebas documentales sugieren lo contrario.
Las irregularidades apuntan directamente a la Directora de Recursos Materiales, Dora Oralia Valdéz Zozaya, y ha Héctor González Rentería, alias “El 8”, quienes habrían operado la adjudicación directa a MANIFLOSA S.A. de C.V., beneficiando a su representante legal, Martín de Jesús Flores Rivera.
El patrón de contratos a modo, los pagos millonarios exprés y la falta de transparencia en la entrega de equipos tiene a la Secretaria de Salud envuelto en este escándalo.
Mientras la Secretaría de Salud pide “evitar especulaciones”, los hechos hablan por sí solos: 199 millones de pesos pagados, más del 50% de la compra y sin comprobantes de entrega de insumos.