Luego de que seis estudiantes de tercer grado de la Escuela Secundaria General Número 1 fueron hospitalizados la tarde del jueves tras presentar síntomas de intoxicación alimentaria, la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris) ha iniciado una investigación para determinar la causa del incidente.
Hugo Alejandro Soto Guevara, director de Operación Sanitaria de la dependencia estatal, informó que se tomaron muestras de los alimentos consumidos, específicamente boneless, los cuales fueron enviados al Laboratorio Estatal de Salud Pública para su análisis microbiológico. Además, se llevará a cabo una verificación en el establecimiento que proporcionó los alimentos para evaluar si cumple con las normas de higiene y sanidad.
Aunque el proveedor lleva apenas un mes prestando servicio en la escuela, las autoridades indicaron que, de confirmarse que la comida estaba en mal estado o que el establecimiento incumple con la normatividad, podría enfrentar sanciones que van desde una clausura temporal hasta una multa.
“Nosotros tenemos que dar seguimiento y ya estamos esperando los resultados. Independientemente de esto, se debe realizar la trazabilidad del manejador de alimentos que elabora la comida y que actualmente da el servicio de manera temporal en la escuela”, explicó Soto Guevara.
Si bien el proveedor traslada los alimentos al plantel , puntualizó que esto no lo exime de cumplir con las prácticas de higiene y sanidad. Por ello, reiteró que en el transcurso de este viernes se estaría realizando una visita de verificación para evaluar las condiciones en que opera.
“Si las muestras arrojan resultados positivos a malas prácticas sanitarias, el establecimiento podría ser suspendido temporalmente o recibir una amonestación con la posibilidad de una multa”, advirtió el funcionario.
Como medida precautoria, la venta de alimentos por parte de este proveedor está suspendida. Asimismo, se ha exhortado a la escuela a fomentar la buena alimentación y a verificar que, antes de contratar un servicio de alimentos, el responsable cuente con un aviso de funcionamiento y un certificado de manejador de alimentos vigente, documentos que avalan el cumplimiento de las normas sanitarias.
De acuerdo con Coepris, los seis estudiantes afectados presentaron síntomas como vómito, dolor abdominal y, en dos casos, parestesia.
Respecto al estado de salud de los adolescentes, el director del Hospital Infantil, Vicente Plasencia Valadez, confirmó que sí hubo un cuadro de intoxicación alimentaria, pero aseguró que no fueron casos graves, por lo que todos fueron dados de alta la misma noche del jueves.