La glorieta del crucero en donde entroncan la avenida Tamaulipas y el Libramiento Naciones Unidas se ha convertido en un problema de dos caras: Uno por su alto riesgo de accidentes ante la mala distribución de semáforos y la otra por el estrangulamiento de la circulación vehicular en la salida a Monterrey.
Este escenario fue expuesto por representantes de las empresas ubicadas en esa confluencia vial, en donde originalmente se había proyectado un paso a desnivel o “joroba”, pero en el gobierno de Egidio Torre se desechó y se construyó la glorieta.
Esta obra, que desde los planos fue criticada por expertos en vialidad e ingenieros urbanos por la problemática que significa, actualmente es un cuello de botella que ha dejado una estela de colisiones y genera un caos en el movimiento de automóviles en horas pico, señalaron los voceros de los comercios.
Por lo anterior, los denunciantes demandaron que se haga un estudio de vialidad realista y se impulse el paso a desnivel que se relegó, que resolverá no sólo el problema actual, sino también el crecimiento del aforo vehicular por los próximos 20 años.
Entre los giros ubicados en ese punto, que suman a diario miles de vehículos y personas como visitantes, se encuentran Liverpool, Home Depot, Auto Zone, Carl’s Junior, Dairy Queen y otros más pequeños, pero igualmente afectados.