La Auditoría Superior de la Federación (ASF) ha informado que el gobierno de Tamaulipas, encabezado en 2022 por Francisco García Cabeza de Vaca, incumplió con la entrega de más de 500 millones de pesos que debieron ser destinados a la Universidad Autónoma de Tamaulipas.

De acuerdo con los datos de la ASF, de la cuenta pública 2022, el gobierno estatal acordó entregar mil 691.3 millones de pesos a la universidad, pero en realidad sólo proporcionó mil 190.4 millones de pesos, es decir, el 70.4 por ciento del monto convenido.

Este informe, recientemente divulgado, arroja luz sobre el panorama de las aportaciones estatales a las Universidades Públicas Estatales (UPES) en todo México, encontrando que 17 de los 31 estados aportaron menos del 100 por ciento de los recursos estatales acordados para 2022. Sólo 12 estados aportaron el 100 por ciento y dos excedieron la cantidad convenida.

Los fondos estatales destinados a las UPES se utilizan para cubrir gastos de servicios personales, incluyendo salarios para directivos, docentes, administrativos y capacitadores.

También se destinan a gastos de operación para adquirir materiales, suministros y servicios generales. La ASF identificó un déficit total de 3 mil 716.7 millones de pesos (el 13.5 por ciento del total acordado) en la entrega de recursos estatales a las UPES en 2022, en todo el país.

Este déficit se debe a dos factores: el incumplimiento por parte de los estados en el porcentaje establecido en los convenios y la falta de entrega de la documentación comprobatoria que impidió realizar el análisis completo. La falta de cumplimiento en la aportación de los recursos estatales ha generado observaciones administrativas que han resultado en la promoción de responsabilidades administrativas sancionatorias.

La ASF ha abierto casos individuales de auditoría para investigar estos hallazgos. La ASF consideró que el incumplimiento de las obligaciones financieras por parte de los gobiernos estatales amenaza la calidad y continuidad de la educación superior en México.