La crisis hídrica en la capital del estado continúa agravándose, y ante las altas temperaturas y los bajos niveles de almacenamiento en las fuentes secundarias de abastecimiento, la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (COMAPA) recomendó a la población tomar precauciones, como instalar tinacos y hacer un uso eficiente del vital líquido.

Fernando García Fuentes, gerente del organismo, explicó que si bien la presa Vicente Guerrero dispone de suficiente agua —al encontrarse al 57 % de su capacidad—, la falta de infraestructura impide extraer más de 890 litros por segundo.

“No podemos traer más; esa es la capacidad del tubo. Una vez que tengamos la segunda línea del acueducto, la situación cambiará”, añadió.

El problema más grave, indicó, se encuentra en el manantial La Peñita, que actualmente opera con un déficit de más de 400 litros por segundo. Esta situación ha obligado a aumentar la frecuencia de los llamados “tandeos”.

“Estamos produciendo entre 260 y 270 litros por segundo, cuando en el mejor de los casos hemos llegado a contar con hasta 750. De ahí la razón por la cual hemos tenido alguna problemática en la distribución del agua en la ciudad”, señaló.

Ante este escenario, García Fuentes subrayó la importancia de que las familias cuenten con tinacos o contenedores para almacenar agua, ya que, mientras las condiciones no mejoren, esta sería la única forma de disponer del vital líquido a lo largo del día.

Otro factor que agrava la problemática son las altas temperaturas, que han incrementado la demanda de agua en los hogares. Esta exigencia, trasciende que, aunque no se ve reflejada en un gasto de agua de agua como tal, en el aumento del volumen de quejas.

“Sí se ha incrementado la demanda, pero no podía precisar una cifra o un porcentaje porque solo el agua que producimos es la que distribuimos, no hay excedentes que podamos usar, pero nos damos cuenta de que la gente requiere disponer por más horas del servicio por las quejas”.

Cabe recordar que, desde poco antes de la primera quincena de abril, Ciudad Victoria fue reclasificada en el semáforo del agua, pasando a color amarillo. Esto se debe a que, aunque se cuenta con el vital líquido, su disponibilidad es moderada.