Canadá nombró a Mary Simon este martes como su primera gobernadora general indígena, la representante oficial de la reina Isabel II en el país de la Commonwealth, mientras la nación enfrenta un ajuste de cuentas con su oscura historia colonial.

Hoy, después de 154 años, nuestro país da un paso histórico”, declaró el primer ministro, Justin Trudeau, en una conferencia de prensa.

No puedo pensar en una mejor persona para afrontar el momento”, destacó.

Simon, experiodista y defensora de los derechos de los miembros de los pueblos nativos inuit, se había desempeñado anteriormente como presidente de Inuit Tapiriit Kanatami, la organización inuit de Canadá.

También fue presidenta de la Conferencia Circumpolar Inuit, que representa a los inuit en todos los países árticos.

Pesadillas del pasado colonial
Su nombramiento como representante virreinal, responsable de dar el asentimiento real o ejecutar actos aprobados por la ley del Parlamento y encabezar las Fuerzas Armadas de Canadá, llega en un período difícil en las relaciones del país con las denominadas Primeras Naciones.

El reciente descubrimiento de más de mil tumbas sin identificar en antiguos internados indígenas ha convulsionado a Canadá, provocando ira y dolor en las comunidades nativas.

Hasta la década de 1990, unos 150 mil jóvenes indígenas, inuit y metis, fueron internados por la fuerza en 139 escuelas residenciales administradas por la Iglesia Católica en nombre del gobierno.

Más de 4 mil estudiantes murieron por enfermedades y actos de negligencia.

Otros sufrieron apremios físicos y abusos sexuales por parte de los regentes o maestros que los alejaron de su cultura y lenguaje.