Medio millón de niños han salido ya de Ucrania como refugiados tras una semana de guerra, alertó Unicef, que confirmó que al menos 17 menores han muerto como consecuencia de los combates y 30 han resultado heridos.

En un comunicado, la agencia de la ONU para la infancia apuntó que se espera que esas cifras sigan creciendo en los próximos días y que las necesidades humanitarias se multipliquen.

En total, el número de refugiados fruto de la invasión rusa de Ucrania supera ya el millón, según el alto comisionado de la ONU para los refugiados (Acnur), Filippo Grandi.

En su nota, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) aseguró que el conflicto está teniendo un impacto devastador para los niños ucranianos, con millones de ellos afectados por la violencia, sobre todo ante el aumento de los bombardeos en zonas urbanas.

“El uso de armas explosivas en ciudades podría convertir rápidamente esta crisis en una catástrofe para los niños de Ucrania”, señaló el director regional de Unicef para Europa y Asia Central, Afshan Khan.

“No hay operaciones armadas de esta escala que no resulten en daño a los niños. Las consecuencias serán trágicas”, insistió.

Hasta ahora, Naciones Unidas ha confirmado la muerte de 17 niños en lo que va de guerra, aunque esa cifra solo incluye los casos que la organización ha podido verificar, por lo que estima que el número real es probablemente mucho mayor.

Según Unicef, cientos de hogares han sido dañados o destruidos y hay información de ataques que han golpeado escuelas, orfanatos o clínicas de salud.

La agencia subrayó que las necesidades humanitarias en Ucrania se multiplican cada hora y que ya hay cientos de miles de personas sin acceso a agua segura por daños en infraestructuras, mientras que muchos otros no tienen acceso a médicos y algunas zonas se están quedando sin ciertos medicamentos.

Unicef dijo que está reforzando sus operaciones para llevar ayuda vital a niños y familias en Ucrania y también para apoyar la acogida de refugiados en los países vecinos.