La Casa Blanca aplaudió este miércoles la nueva prohibición de armas de asalto aprobada en el estado de Illinois, que se ha convertido en el noveno estado de Estados Unidos en el país en adoptar esta medida.
La vocera de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, declaró que el presidente estadunidense, Joe Biden, “elogia el liderazgo del gobernador de Illinois JB Pritzker”, así como a otros altos cargos y numerosos defensores y supervivientes por sus “esfuerzos incansables”. En este sentido, la Administración Biden considera que su trabajo “cambiaron el dolor” de los actos de violencia con armas de fuego “en una acción significativa en nombre de todos los habitantes de Illinois”.
“Demasiados estadunidenses en todo el país continúan perdiendo la vida o sus seres queridos a causa de la violencia armada”, ha lamentado el Jean-Pierre, según se puede leer en un comunicado de la Casa Blanca.
Además, Biden ha “seguido presionando para que se tomen más medidas”, al tiempo que ha instado a otros estados a seguir el ejemplo de estos nueve estados —desde California y Nueva Jersey hasta Nueva York y Washington—-.
Con todo, la vocera de la Casa Blanca destacó las “medidas históricas” del presidente para reducir la violencia con armas de fuego, remarcando la firma de la Ley Bipartidista de Comunidades más Seguras, a la que califica de “primera legislación importante sobre seguridad de armas en casi 30 años”.
Pritzker promulgó el martes por la noche una ley que prohíbe la venta y distribución de armas de asalto y cargadores de alta capacidad, medida que entró en vigor inmediatamente, informó la cadena CBS.
“Durante los últimos cuatro años, mi administración y mis colegas en el Capitolio del Estado han estado luchando contra las poderosas fuerzas de la NRA (Asociación Nacional del Rifle) para consagrar la legislación contra la violencia armada más fuerte y eficaz que podamos”, declaró Pritzker en un comunicado.
El gobernador hacía referencia con esta declaración a que el proyecto de ley llevaba años debatiéndose, pero que había recibido un apoyo renovado tras el tiroteo del desfile del 4 de julio de 2022 en Highland Park, que dejó siete muertos y decenas de heridos, después de que el sospechoso, de 21 años, utilizase un arma semiautomática adquirida legalmente, según la fiscalía.