El Ministerio Público y la Policía Nacional del Perú (PNP) verifican este miércoles el ingreso a Lima de manifestantes en vehículos, procedentes de distintos puntos del país, un día antes de la concentración convocada en la capital peruana para exigir la renuncia de la presidenta Dina Boluarte.
Representantes de la Fiscalía de Prevención del Delito de Lima Este, junto a la PNP, se desplazaron al peaje de Corcona, en el distrito de Huarochirí, y al distrito de Chosica para realizar acciones de control de identidad en vehículos, según informó el Ministerio Público en su cuenta de Twitter.
De la misma forma, la Fiscalía de Prevención del Delito de Lima Noroeste realizó el mismo operativo el martes en el peaje de la variante del distrito de Ancón al norte de Lima.
Con estos operativos, la Fiscalía y la Policía Nacional de Perú están verificando el ingreso de los cientos de manifestantes en buses que se dirigen a Lima desde las regiones sureñas de Puno, Cuzco, Apurímac, Ayacucho y Arequipa, entre otras, con la intención de pedir la renuncia de Boluarte, el cierre del Congreso y la convocatoria a elecciones generales adelantadas y una asamblea constituyente.
Por su parte, algunos grupos de manifestantes que llegaron a Lima en las últimas horas han ingresado a la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en su campus, junto a cuyos estudiantes anuncian que marcharán el jueves, según han compartido algunos integrantes de esa casa de estudios en redes sociales.
Las principales plazas del centro histórico de Lima permanecen resguardadas por la Policía Nacional y seguridad de los municipios.
A la par de las movilizaciones hacia la capital de Perú, los bloqueos de carreteras y paros continúan en 8 regiones del país, donde hay unos 94 puntos de tránsito interrumpidos, que afectan 16 carreteras nacionales, según el último reporte de la Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías (Sutran).
En la provincia de Virú, en la norteña región de La Libertad, permanecen decenas de buses varados por el bloqueo de la carretera Panamericana Norte, a pesar de que la Policía desalojó algunos tramos de esa misma vía el martes.
Hasta el momento, 41 manifestantes y un policía han muerto en las protestas, así como ocho personas más, que han perdido la vida por distintas causas provocadas por los bloqueos de carreteras y manifestaciones.
La jefa de Estado declaró el martes que las carreteras iban a ser desbloqueadas por las fuerzas de seguridad y que espera a los manifestantes que llegarán a Lima con el fin de conversar sobre sus reclamos sociales, pero no políticos.
Boluarte remarcó que la agenda política que plantean “es inviable desde el Ejecutivo”, en alusión a que los manifestantes piden su renuncia y el cierre del Congreso, además de que se convoque a elecciones generales y a una asamblea constituyente.