La Oficina Meteorológica de Islandia reportó que la lava parece estar fluyendo rápidamente hacia el norte de Grindavik.
Reportaron que la fisura por la cual sale el magma cuenta con unos tres kilómetros de largo.
La Policía reportó que unas 700 personas se encontraban en la Laguna Azul y muy pocas en Grindavik, cuando comenzó la operación de evacuación.
Esperan que la lava llegue a la carretera principal de la localidad, pero los aeropuertos regionales no están afectados.