El Pentágono planea enviar a Ucrania baterías Patriot, diseñadas para derribar misiles enemigos, según informaron el martes medios de comunicación estadunidenses.
La administración del presidente Joe Biden tiene previsto anunciar el envío esta misma semana, según han declarado funcionarios estadounidenses a The New York Times y CNN, ante la intensificación de los ataques rusos con misiles contra infraestructuras ucranianas clave.
Las defensas aéreas de Ucrania han desempeñado un papel clave durante la invasión rusa, pero ahora que Moscú está intensificando sus ataques contra infraestructuras energéticas y se enfrenta a pérdidas cada vez mayores sobre el terreno, Kiev ha presionado repetidamente a otros países, especialmente a Estados Unidos, para que le suministren el sistema Patriot.
El ejército estadunidense describe el Patriot (compuesto de un radar, una estación de control, equipos generadores de energía y ocho lanzadores) como su “sistema de defensa aérea más avanzado”.
Aunque se asignan docenas de efectivos a una batería, sólo se necesitan tres para operarla en combate.
El primer sistema Patriot estadunidense se activó en 1982, pero el sistema no se utilizó en combate hasta 1991, durante la Operación Tormenta del Desierto, la ofensiva internacional aérea y terrestre contra las fuerzas iraquíes que habían invadido Kuwait.
Patriot ha interceptado más de 150 misiles balísticos en combate desde 2015, y también ha sido sometido a más de 3 mil pruebas en tierra y mil 400 en vuelo, según el contratista principal Raytheon.
Cuando Rusia comenzó la invasión de Ucrania en febrero, las defensas aéreas de Kiev estaban compuestas en gran medida por aviones y sistemas de misiles de la era soviética.
Desde entonces han aumentado considerablemente su capacidad antiaérea. Estados Unidos proporcionó NASAMS y Alemania ofreció IRIS-T, dos sistemas avanzados, mientras que también se han donado equipos más antiguos, como los S-300 y HAWK, así como los misiles Stinger.