La economía estadounidense sumó 390 mil nuevos puestos de trabajo en mayo de 2022, bajando ligeramente de los más de 400 mil nuevos empleos que se venían creando cada mes durante el último año, aunque todavía muestra signos de robustez.
La tasa de desempleo se mantuvo en 3.6 por ciento, lo mismo que en abril y en marzo, a pesar de que existían expectativas de que alcanzara por fin 3.5 por ciento de febrero de 2020, antes del comienzo de la crisis económica por la pandemia de COVID-19, y a su vez un mínimo en más de 50 años.
Los datos muestran la moderación de un mercado laboral que continúa siendo robusto pese al miedo de que la economía entre en recesión por las subidas de tipos de interés que la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) ha aprobado para tratar de poner coto a una inflación desbocada.
En parte, las buenas cifras del empleo están agravando la inflación, ya que las empresas se ven obligadas a subir los salarios para atraer trabajadores, por lo que aumenta la capacidad adquisitiva de los consumidores y esto permite que también aumenten los precios de los alimentos, la energía y los alquileres, entre otros.
La moderación del mercado laboral es por tanto una buena noticia para la Fed, que se prevé siga aumentando los tipos de interés, que actualmente están en una horquilla del 0.75 por ciento y el 1 por ciento, por lo menos mientras la creación de empleo continúe siendo robusta.
La subida de tipos ya ha generado un efecto en la economía, elevando los tipos hipotecarios y aumentando el precio de la deuda.
La economía estadounidense se contrajo 0.4 por ciento en el primer trimestre del año por primera vez desde mediados de 2020, tras lo que la Casa Blanca reconoció por primera vez la posibilidad de que el país entre en recesión.
Tradicionalmente, se considera que una economía ha entrado en recesión cuando encadena dos trimestres seguidos de contracción.
El número de personas sin trabajo en la mayor economía del mundo se mantuvo por tanto en torno a los 6 millones, una cifra prácticamente idéntica a las de abril y marzo, con la mayoría de sectores sumando trabajadores en el mes de mayo.
Una excepción fue el sector de la venta minorista, que perdió más de 60 mil puestos de trabajo.
El sector de la hostelería y la restauración, sin embargo, uno de los más afectados por la pandemia, sumó 84 mil nuevos puestos de trabajo en el mes de mayo, impulsado por la mayor capacidad adquisitiva de los hogares estadounidenses.
También sumaron nuevos trabajadores el sector de la construcción (36 mil empleos), la logística y el transporte (47 mil empleos) y el de los servicios a empresas, como la contabilidad o el diseño de programas informáticos (75 mil empleos).
Además, se mantienen estables las diferencias entre grupos raciales: mientras que la tasa de desempleo entre los blancos es de 3.2 por ciento, sube a 6.2 por ciento entre los negros y está en torno a 4.3 por ciento entre los hispanos.
Asimismo aumentaron 10 centavos los salarios medios por hora entre los empleos de empresas privadas, hasta los 31.95 dólares.
El dinero que los trabajadores en empresas privadas ganan de media cada hora ha aumentado más de 5 por ciento durante los últimos doce meses.