A través de la Cancillería, el Gobierno de la República de Argentina anunció que “formalizó hoy su retiro del denominado Grupo de Lima, al considerar que las acciones que ha venido impulsando el Grupo en el plano internacional, buscando aislar al pueblo venezolano y a sus representantes, no han conducido a nada”.
Una vez más, reiteramos que la mejor manera de ayudar a los venezolanos es facilitando que haya un diálogo inclusivo que no favorezca a ningún sector en particular, pero sí a lograr elecciones aceptadas por la mayoría con control internacional.
El gobierno de Fernández reiteró su interés de buscar “diálogo inclusivo” para ayudar a los venezolanos, sin favoritismos y con el objetivo de “lograr elecciones aceptadas por la mayoría con control internacional”.
El Grupo Lima nació en 2017 de la Declaración de Lima en 2017 en la capital de Perú, donde se reunieron representantes de catorce países, entre ellos Argentina y México, así como otros de América, con el objetivo de conseguir en Venezuela:
Liberación de presos políticos.
Elecciones libres.
Ayuda humanitaria.
También denunciaron ruptura del orden institucional en Venezuela bajo el mandato de Nicolás Maduro.
Maduro, Argentina y México.
Argentina es el primer país que abandona este grupo. El presidente Fernández ha mostrado acercamiento a Nicolás Maduro, con quien tiene coincidencias ideológicas.
El propio Maduro elogió al mandatario argentino, así como a Andrés Manuel López Obrador de México, al llamarlos el “nuevo frente progresista” de América Latina, pues ambos presidentes llegaron al poder recientemente y representan un nuevo eje frente al “neoliberalismo”. Incluso el venezolano se refirió a ambos como sus “amigos”.
México todavía está en el Grupo Lima pero se ha abstenido de firmar o adoptar los recientes acuerdos del bloque de países.