La época de oro del cine mexicano llegó a Yugoslavia con películas que hacían referencia a la Revolución Mexicana. Una de las más destacadas y que hoy muchos consideran “más de Yugoslavia que de México”, fue ‘Un día de Vida’.

La sensación por las películas mexicanas llegó a esa región cuando en 1948, la Unión Soviética expulsó a Yugoslavia de la Oficina de Información Comunista. Yugoslavia luchaba por encontrar su propia trayectoria comunista, pero no podían continuar con la proyección de películas soviéticas, así que decidieron reemplazarlas con una selección internacional más amplia, incluyendo películas mexicanas. Así, la película ‘Un día de Vida’, de Emilio ‘El Indio’ Fernández llegó a Yugoslavia con el nombre de ‘Jedan dan života’. “Ninguna película capturó la imaginación y agitó tanto las emociones del público yugoslavo como Un día de vida (1950), de Emilio Fernández.

Prácticamente desconocida en el México actual, esta película fue tan popular en la antigua Yugoslavia que incluso en la actualidad su búsqueda en Google ha generado numerosas entradas en los foros de discusión respecto a ella”, escribió la investigadora Brana Mijatovic en un texto del repositorio de la mediateca INAH. La película narra la historia de un coronel de la Revolución Mexicana condenado a muerte.

Su fecha de ejecución se programó para el 24 de junio, día en que cumple años su mamá, y le conceden pasar su último día de vida al lado de ella. La escena en que el coronel le canta las mañanitas a su mamá conmovió a toda Yugoslavia, pues la madre finge no saber el destino que le espera a su hijo.

Es gracias a esta escena que ‘Las Mañanitas’ llegaron a Yugoslavia, donde la canción se conoció como ‘Mamá Juanita”. La escena “hizo que toda Yugoslavia llorara”, escribió Mijatovic.

Se calcula que uno de cada 2 yugoslavos fueron al cine a verla. Según la especialista, la película mexicana se exhibió en las salas de cine durante dos décadas. El escritor Voja Rehar explicó las razones de la popularidad de ‘Un día de Vida’: “A través de Un día de vida, México se entregó, dijo todo sobre sí: dijo su historia y predijo su futuro, nos mostró su corazón; lo vimos y lo sentimos. Es la primera vez cuando, al ver a México, pensé en Yugoslavia.

Tal vez fue el sentimiento subconsciente de conexión, tal vez la similitud en los corazones y los personajes: sus canciones y bailes parecían similares a los nuestros, su país al nuestro, su gente a la nuestra”. Actualmente, Yugoslavia está conformada por Eslovenia, Montenegro, Bosnia y Herzegovina, Croacia, Macedonia del Norte y Serbia. Y la película completa ‘Un día de Vida’ se puede ver aquí los subtítulos originales en serbocroata.