A cuatro días de la desaparición de los integrantes de un grupo musical en Reynosa, los cuerpos de cinco personas fueron localizados en el área investigada por las autoridades, y se presume que podrían ser los integrantes del grupo musical desaparecido el lunes 26 de mayo.

El Fiscal General de Justicia de Tamaulipas, Irving Barrios Mojica, no se aventuró a confirmar la identidad de los cuerpos localizados pero detalló que ya se realizan los análisis periciales, además informó que hay nueve personas detenidas por estos hechos.

Los familiares por su parte se niegan a creer la versión de su muerte y aseguraron que hasta que no se realicen pruebas de ADN ellos tendrán la esperanza de encontrarlos con vida. Ellos exigen que el procedimiento se lleve a cabo conforme a los protocolos legales y se respeten los derechos de las víctimas, consideran que la Fiscalía no fue clara con ellos al momento del hallazgo y que le dieron prioridad a la opinión pública antes que a los familiares.

Sin duda, una tragedia más que vuelve a marcar a los tamaulipecos.

Y mientras la tragedia sacude a Reynosa, el calendario avanza.

Este domingo 1 de junio los tamaulipecos volverán a las urnas en un proceso electoral extraordinario para elegir a quienes tendrán en sus manos la impartición de justicia, juezas y jueces tanto del Poder Judicial Estatal como Federal.

Es un ejercicio inédito, que requiere más que nunca la participación ciudadana. El INE y el IETAM reportan avances del 75% en la entrega de paquetes electorales y más de 6,600 observadores acreditados. Se instalarán 2,466 casillas en todo el Estado para que casi tres millones de electores puedan ejercer su derecho al voto.

El llamado está hecho: La autoridad organiza, pero el poder lo tiene la gente.

Elegiremos a quienes tendrán la encomienda de proteger nuestra vida, libertad y patrimonio. Después de tragedias como la de Reynosa, ¿queda alguna duda de que necesitamos un sistema de justicia sólido, autónomo y comprometido?

Este domingo es la oportunidad de exigirlo con el voto.

 

Que Dios los bendiga, gracias. Leo sus comentarios en mis redes sociales.