Para un corazón eternamente enamorado y muy sensible, resulta poco comprensible, cómo el amor es tristemente evaporado, por el infame calor que sale de una frase llena de rencor antes simulado. De pronto te volviste inaccesible, cegada por otro amor, que sin duda, ahora y siempre fue mayor al que me diste. Si amarme fue un error y no lo dijiste por temor, yo te juro, que le pediría al buen Señor, que me alejara de ti, para seguir mi vida en soledad y triste como ahora estoy desde el día en que me heriste.
FRASE EQUIVOCADA
Desde que te conocí se iluminó mi vida,
si antes había sol, no lo había notado
porque estaba sólo y triste.
Qué difícil habrá sido entonces darme el sí,
al haberme encontrado y consolado,
y yo ciego por amor no lo percibí.
No entiendo por qué lo consentí,
si el amor no fue por el dolor aconsejado,
y mi tiempo todo ha sido para ti.
Yo nunca a conveniencia te mentí,
te dije siempre estar de ti enamorado,
y de ello nunca me arrepentí.
Que la vida en realidad es así,
igual es acertar, que estar equivocado,
entonces, finjamos… ya lo decidí.
Correo electrónico:
enfoque_sbc@hotmail.com