Nacer a la vida riendo con ella, dándole gracias a Dios por la dicha que me hizo feliz, reír e ir caminando repartiendo alegría, que para mí no era un decir; hasta encontrar la amargura, que desplazó la dulzura, para intentar hacerme infeliz. Conservar la cordura para seguir caminando, hasta encontrar el humor que me fue arrebatado sin causa aparente, y volver a reír para vivir sanamente.
EXTRAVIADO
Lo extraño, para qué seguir, y negarlo,
su presencia, me hacía más que feliz,
que el volver al pasado y recordarlo,
entristece mi alma y me hace infeliz.
Sí, el sólo hecho de volver a pensarlo,
me regresa al estado de un aprendiz,
que ansioso desea volver a encontrarlo,
saliendo del claustro llamado matriz.
Que, ¿por qué lo perdí? fue sin desearlo,
me bastó un regaño para cortar de raíz
la energía que a mi ser solía animarlo,
y nutría el motivo de mi fuerza motriz.
Hoy, un tanto perdido voy a meditarlo,
imploraré al cielo me marque la directriz,
para encontrar el camino y recuperarlo,
porque el humor, amigos me hacía feliz.
Correo electrónico: enfoque_sbc@hotmail.com