Estamos a 67 días de que entre en funcionamiento el procedimiento de “entrega-recepción”, mediante el cual los servidores públicos de la administración saliente harán entrega física y de documentos a quienes los van a sustituir, esto incluye recursos humanos, materiales y financieros. De acuerdo a lo establecido por la ley en materia esta etapa tiene 30 días de duración (el mes de septiembre) y establece 60 días posteriores para que el nuevo gobierno (que inicia el 1º de octubre) reclame las aclaraciones que considere necesarias.

Este es un episodio que siempre ha sido interesante porque quienes sean designados para conformar el Comité de Enlace que represente al gobierno entrante, serán prácticamente los futuros funcionarios, aunque no hay un sustento jurídico para dar certidumbre de ello.

Por otra parte en esta ocasión hay morbo porque muchos están esperando que surjan faltantes, es decir malas cuentas para contribuir al juicio sumario que se estaría esperando aplicar al gobernador saliente, que para entonces ya no tendrá fuero.

Este miércoles Santiago Nieto Castillo, ex titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UFI) en un artículo de su autoría publicado por La Jornada (https://www.jornada.com.mx/2022/06/22/opinion/018a1pol), se refiere al proceso de transición y con toda mala voluntad, dice que Tamaulipas “es el único estado donde no ha habido acercamiento por parte del gobierno saliente para la entrega-recepción”.

Es del dominio público que Santiago Nieto y Francisco García Cabeza de Vaca traen una confrontación de tiempo atrás, pero el tema es que el ex titular de la UIF, es un jurista reconocido, y que debió consultar la ley en materia para el Estado de Tamaulipas, donde el Art. 10 establece entre otras cosas, que: “La designación del Comité de Enlace corresponde a la persona que se encuentre legalmente autorizada para tomar posesión del cargo que corresponda, quien le comunicará por escrito al servidor público que concluirá su gestión”.

La ley para la entrega recepción deja muy claro que los funcionarios salientes no podrán abandonar sus responsabilidades, las que tienen que cumplir hasta el último momento del ejercicio gubernamental y precisa, que  sólo dedicarán 4 horas de la jornada diaria de los 30 días que la ley establece para el procedimiento.

Quisimos abordar este tema, porque el ciudadano común debe de estar enterado sobre este procedimiento de transición, para que no se deje engañar con falsas especulaciones; si bien el Partido Acción Nacional ha impugnado los resultados hasta ahora oficiales, el fallo final lo dictará el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y es inapelable. Al respecto César Verástegui Ostos declaró en su momento que respetaría el fallo de ese órgano.

Estaremos siguiendo el procedimiento de esta transición para mantenerlos informados.

            EL RETO DE COGOBERNAR CON EL LEGISLATIVO AZUL 

Los diputados morenistas no han creando el mejor clima en el Congreso del Estado de Tamaulipas, cuando este poder estará coexistiendo durante dos años con el Poder Ejecutivo que entrará en vigor a partir del próximo 1º de octubre. En estos tres meses el gobernador electo Américo Villarreal Anaya quizá debiera de buscarles un asesor para que los oriente y conduzca con propiedad y eficiencia, y sobre todo para que los ubique en toda su dimensión en busca de resultados que permitan al doctor sacar adelante sus proyectos o propuestas legislativas.

 Tal como ahora se desenvuelve la bancada de Morena sólo están montando un show mediático y no trabajo legislativo. Hasta ahora las diferentes reseñas de los procedimientos utilizados narran que llenan las galerías del Congreso con acarreados a quienes ni siquiera les explican porque están ahí; los movilizaron como recurso para detener una iniciativa, lo cual finalmente no lograron.

En algún momento Instalaron mantas con las que dieron por clausurados los trabajos legislativos; intentaron irrumpir en la Junta de Coordinación Política durante sus reuniones de trabajo; los diputados del PAN y PRI y se han visto en la necesidad de encerrarse bajo llave y los morenistas han retirado cadenas y candados.

 La circunstancia es que la condición en que está Morena en el Congreso, por lo menos ahora, no pueden seguir operando con procedimientos de rebeldía, rompiendo protocolos y sobre todo las reglas de operación de ese Poder. El hoy gobernador electo, cuando esté en funciones no se puede distraer en organizar y orientar directamente el desempeño de los diputados de su partido. Cierto que es una función que compete directamente al Secretario General de Gobierno, al que se nombre.

Es una tarea un tanto espinosa, porque no es fácil someter a la titular de la coordinación de la bancada de Morena, cuando se trata de la sobrina de ya sabe usted “Quien”, aunque este “Quién”, diga que si la ve en la calle no la conoce. Quizá la mejor salida para facilitar resolver este problema, sea invitar a la diputada en cuestión a ocupar un cargo en el Poder Ejecutivo, porque no tiene madera de líder y los temas en que se ha visto involucrada no le dan la mejor imagen para conducir a sus compañeros de partido.