La ganadería aun con los bemoles de sequias e inseguridad, despojo de ranchos ganaderos, abigeo, robo de jaulas, sigue siendo un sitio predilecto para la inversión. Durante la subasta del viernes en el complejo ganadero, el becerro de exportación corrió a 58 pesos el kilogramo, mientras que la vaquilla corrió en 45 pesos, la becerra también de exportación se vendió en 43 pesos el kilogramo, la vaca parida en 39 pesos, el toro gordo en 35 pesos, la vaca gorda en 32 pesos, toro de desecho 30 pesos, la vaca carnuda en 29 pesos, y la vaca flaca en 28 pesos el kilogramo.
En la pista del salón de subastas de la Unión Ganadera Regional de Tamaulipas circularon 950 ejemplares provenientes de distintas regiones tamaulipecas, clasificados en 180 lotes de ganado de todas las razas. Francisco Trejo Meza fue el subastador oficial, la sala registro un lleno total de compradores y vendedores.
La sala de subasta se han convertido en un instrumento para que los productores-criadores de ganado bovino puedan obtener un precio justo de sus ejemplares, pero también es un organismo de regulación de los precios. Pues en repetidas ocasiones la UGRT ha entrado a rescatar lotes de ganado que los compradores-coyotes han pretendido abaratar y como se dice en el medio ganadero quieren “garrotear” a los productores-criadores de ganado comercial, situación que ha sido frenada por la organización ganadera.
Como en toda organización y empresa también ha habido irregularidades. Como es el caso en el que el delegado de la Sagarpa en Tamaulipas Eduardo Mansilla introdujo en años anteriores un lote de ganado reportado como robado, que motivo una inspección ocular de la policía federal preventiva, pero el lote de referencia ya había sido transferido a otra entidad de la república.
Una severa irregularidad que alcanzo a salpicar a otros representantes de los ganaderos tamaulipecos, ya que se utilizaron aretes de siniga para darle entrada al ganado de origen hurtado.
Lo cierto es que bien o mal pero los vientos de cambio siguen soplando y fuerte en el campo tamaulipeco sobre todo en la Unión Ganadera Regional de Tamaulipas, donde la tarde del miércoles renunció a la tesorería José Guerrero Gamboa cuñado del ex gobernador priísta Manuel Cavazos Lerma. En un supuesto que casi es un hecho se perfila como nuevo tesorero Roberto Ramírez Villarreal un productor ganadero de la prodigiosa región de la Sierra de Maratines, que se localiza en entre los municipios de Aldama y Soto La Marina de la costa tamaulipeca.
Hacia el interior de la misma organización ganadera se aproxima también la renuncia de Ramón Ortiz Azuara secretario de la UGRT y como relevo se perfila el reinosense Jorge Cantú, también productor de ganado.
Con estas renuncias queda prácticamente limpio o libre del estigma priista esta noble organización que se contaminó de los paradigmas nefastos del priato en esta entidad, durante el periodo del toma y daka en el que la dirigencia se corporizaba y el otrora partidazo figuraba fortalecerse.
La descomposición se registró en esa organización con la llegada de Manuel Cavazos Lerma a la gubernatura tamaulipeca, cuando hizo diputado local a su amigo y prominente ganadero fronterizo Eulalio Guerra Guerra criador de registro de la raza Beefmaster. Posteriormente este fue desdeñado por Tomás Yarrington Ruvalcaba y el cargo de dirigente lo ocupo Eugenio Benavides Benavides, que se perpetuo en el puesto durante los seis años del huésped de Florencia, Italia.
Es un tema que obliga a una nueva entrega. Pues la memoria historia nos dice que también un ex dirigente y un secretario de desarrollo rural comparecieron ante la PGR,
por acusaciones de un empleado que amerito iniciar una carpeta de investigación por presuntos delitos contra la salud.
En otro orden el gobernador tamaulipeco Francisco García Cabeza de Vaca presidio los trabajos de protección civil, de frente a la temporada de ciclones que para este 2017 se esperan sean más agudos esos fenómenos naturales en esta región del Golfo de México.
Mientras que en el Congreso tamaulipeco los legisladores dieron entrada a distintas leyes relacionadas con la ley anticorrupción. Y le dieron la bienvenida también a nueva reformas a la ley de alcoholes y de desarrollo urbano y ecología para frenar por diversas vías la apertura de centros de juegos y apuestas así como a los denominados table dance, afecciones nocivas para la sociedad y las finanzas de la familias, pues los maridos dejaban más de media quincena en los table dance. Ya que Seduma es quien autoriza el uso de suelo para la instalación de estos jugosos negocios.
El gobierno estatal pretende de esta manera recuperar el control de este tipo de establecimiento, el cual perdió en los años de contubernio de los gobierno priísta con ese segmento de vicios enfermizos.