Arturo Soto Alemán, candidato del PAN a la alcaldía de Victoria se mostró alegre en campaña, mantenía la sonrisa aunque sin el éxito e impacto de Óscar Almaraz. Ahora subsecretario de Ingresos de la Hacienda Estatal se mostró eficiente en la recaudación en un momento coyuntural; cierre del actual ejercicio fiscal y apertura del nuevo. Aprovechó el aguinaldo para perdonar a los miles de deudores en el estado por concepto de pagos de derechos vehiculares con relación a la compra, venta y uso de todo tipo de vehículo de motor. Hay quienes sacaron licencia de manejo para automovilista y para uso de motocicleta.

Logró captar ingreso en una etapa en la que el presupuesto asignado para 2017 se había ejecutado y disponer mientras fluye el presupuesto 2018; regularizó el estatus de miles de vehículos y de quienes los conducen, y amplió el número de  causantes que en el inicio de 2018 enfrentamos el pago por derechos vehiculares. ¿Importó que miles de causantes paguen en tiempo y forma por los conceptos perdonados los últimos días del año? Se trata de una medida de controversia. Hay  quienes están a favor y quienes en contra. Lo real es que el Gobierno fomenta, alienta y protege el estatus ilícito con relación a los vehículos de motor. La medida tomada por Soto regulariza ese estatus, pero  ¿las autoridades someterán a Leyes y Reglamentos a quienes están sin pagar estos impuestos o seguirán permitiendo el desorden?

Aún no retoma la subsecretaría de Ingresos la facultad recaudadora que tienen en su poder varias organizaciones con membrete campesino, a las que el ciudadano se afilia con el pago de una cuota para adquirir impunidad y circular libremente en autos introducidos vía contrabando. Está pendiente iniciar la mecánica que obligue a quienes poseen autos de procedencia extranjera sin el pago de derechos al pago correspondiente para circular con el conocimiento y permiso oficial. Claro es que se trata de una tarea titánica, de una situación que se tornará crítica luego de que durante decenas de años de corrupción entre el Gobierno, las organizaciones  intermediarias y los ciudadanos suman decenas de miles los automóviles ilegales en la entidad.

Para Soto Alemán la campaña electorera concluyó. Ahora busca maneras de aumentar el ingreso fiscal, acorde a su puesto. Tal vez el éxito que logró vía descuentos a los adeudos por derechos vehiculares en 2017, le llama a continuar la explotación de esta área. En apariencia no quiere meterse en contra de miles de propietarios de autos “chocolates”, tampoco con quienes perderán un jugoso negocio y que incluye a varios niveles de autoridades, y retoma su actividad fiscal sobre el mismo, sobre el causante cautivo, el que cumple, que porta documentos en regla, cuenta con seguro automotriz, y que por su disposición a cumplir con la ley, se vuelve sujeto de vigilancia y de infracciones por Tránsito.

Ahora Soto Alemán pretende multar a los propietarios de vehículos que viven en Tamaulipas y su auto porte placa de otra entidad federativa. Tamaulipas es parte de los Estados Unidos Mexicanos, que posee Constitución que otorga derechos al ciudadano, ley máxima que Soto Alemán olvida “cumplir y hacer cumplir”, como subsecretario de Ingresos.