Omar de la Fuente es director de comunicación social de la UAT y ayer aportó sus propios datos sobre la situación financiera de la institución, que distan mucho del reporte negativo dibujado en un boletín de prensa, por la empresa calificadora internacional Standar & Poors.
De entrada, el joven funcionario universitario citó dos notas halagüeñas: el pago de pensiones a los jubilados está garantizado por los siguientes 30 años, gracias a un fideicomiso alimentado por aportaciones de los propios trabajadores y la Rectoría, y no tiene deuda bancaria la UAT.
La situación económica universitaria es estable, normal, ordinaria, no es jauja pero tampoco crisis. No hay angustia financiera.
Otra buena noticia es que las aportaciones que hace el gobierno del Estado se regularizarán en el corto plazo, en tiempo y monto, debido a que la federación modificó algunas cláusulas.
La federación triangula a través del gobierno del Estado, el dinero del presupuesto de la UAT, pero el gobierno del Estado tiene como costumbre, desde siempre, mermar, mochar o tomar una parte del dinero, porque el compromiso de entregarlo depende de la disponibilidad que tengan de él.
Esta cláusula está en vías de desaparecer, de hecho, se está extinguiendo, gradualmente. Como referencia, en el sexenio de Tomás Yarrington, las aportaciones de la UAT se entregaban con un menoscabo del diez por ciento, más menos.
El porcentaje fue creciendo con el cambio sucesivo de gobiernos. Egidio Torre Cantú retenía o se quedaba con el 40 por ciento de las participaciones universitarias. Reconoce Omar de la Fuente que la brecha está cerrándose con Cabeza de Vaca, que redujo el porcentaje tomado para sí.
No descarta el funcionario, que con el paso del tiempo, los fondos federales se entreguen directamente, completos y sin intermediarios, de la misma manera en que reciben algunos programas de apoyo federales.
El fondo creado por el Rector Humberto Filizola Haces permanece intocado, descontando el dinero que derivó para crear el fideicomiso para el pago de pensiones, que es manejado por el sindicato y tiene un fondo de poco más de mil millones de pesos.
La mala noticia, malísima, es que el Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador mantiene vigente su promesa de campaña, de abolir los exámenes de admisión para que todos los jóvenes ingresen automáticamente, a las Universidades.
El problema es que al menos en lo que corresponde al presupuesto que se debate para 2020, el dinero dispuesto para las Universidades no contempla un incremento en términos reales, efectivos, pues el 3 por ciento anunciado, corresponde al monto de la inflación.
Si las Universidades abren sus puertas a los jóvenes sin necesidad de exámenes de conocimientos, la matrícula crecería entre 30 y 40 por ciento y habría necesidad de contratar más maestros, abrir aulas, laboratorios, gimnasios, ¿y con qué dinero?
De la Fuente aclaró que las 26 escuelas de la UAT no están en riesgo de caer en paro, como ocurre desde ayer en más de 25 universidades del país, en demanda sindical de más recursos.
Uno de los sindicatos universitarios tamaulipecos hará hoy en Reynosa una expresión privada, de solidaridad con sus colegas que están en huelga, pero de manera simbólica, nomás para la fotografía, pues las clases no se suspenderán, de ninguna manera.
Reconoce el vocero las necesidades de la institución que sólo pueden atenderse con más recursos financieros, pero no están en situación desesperada. Cuenta la UAT con un presupuesto anual de tres mil millones de pesos, números cerrados.
El Rector José María Leal Gutiérrez consiguió en su tiempo de gestión, vender paquetes de servicios profesionales a empresas públicas y privadas, en contratos por un monto anual de 700 millones de pesos, en promedio.
Eran clientes frecuentes PEMEX y CFE, pero el Presidente Peña Nieto contrató con empresas diferentes y dejó de concursar las obras. Se acabó esa fuente de ingresos.
En su conferencia de prensa de ayer, López Obrador tronó contra los sindicatos y universidades públicas, asegurando que ni paros ni huelgas van conseguir el chantaje de obligarlo a darles más dinero.
Afortunadamente, la UAT no ha tenido el contagio de la confrontación radical contra la Cuarta Transformación, y permanece trabajando con normalidad.
En temas políticos, el presidente municipal de Nuevo Laredo Enrique Rivas Cuéllar contrató a un magnífico operador de imagen, pues como carta de presentación, la joyita consiguió acercarle a la diputada local de MORENA Carmen Lilia Cantúrosas Villarreal, para tomarse la foto de la unidad.
Rivas Cuéllar es un traidor, mal agradecido, inepto y presunto corrupto, miembro prominente de la pandilla de los vientos del cambio, y sin embargo, la señora Cantúrosas aceptó posar con él dizque para trabajar juntos.
También aparece en la fotografía otra diputada de MORENA, Esther García Ancira, vice-coordinadora parlamentaria, de las que usurparon el nombramiento extendido a favor de la señora Cantúrosas Villarreal.
En Reynosa, manifestantes que olían a establo gritaron mueras a la presidenta municipal Maki Ortiz Domínguez, con cualquier pretexto, contra la propuesta de crear impuestos a taqueros o la desaparición de los carretones jalados por caballos.
El caso es armar barullo en la presidencia municipal, para dar la apariencia de disgusto social contra el Ayuntamiento, aunque es fácil adivinar que se trata de agitación con trasfondo político.
Basta con leer los trabajos pagados por los tucos del gobierno del Estado, para ver la línea conductora.
En Matamoros, los colaboradores del presidente municipal Mario Alberto López Hernández desmintieron categóricamente que existan en la ciudad situaciones de riesgo que obliguen al toque de queda a partir de las once de la noche.
Federico Fernández Morales, Secretario del Ayuntamiento, aseguró que se trata de una campaña de desestabilización alimentada en redes sociales, con falsas noticias de eventos de violencia.
Pidió el funcionario descartar estas noticias catastrofistas, que llevan la intención de inducir a crisis social, para culpar al gobierno municipal.
Por cierto, la FECANACO lanzó la voz de alerta por el aumento del número de secuestros, urgiendo al gobierno federal y estatal a ponerse a trabajar en serio, pues cunde el miedo entre la sociedad.
Julio Almanza Armas, presidente del comercio estatal organizado, denunció que las ciudades fronterizas tienen el asuelo recrudecido del plagio de prominentes empresarios pero también de modestos comerciantes.
En Ciudad Victoria, el presidente municipal Xicoténcatl González Uresti, del PAN, emprendió ahora una campaña de tránsito contra vehículos mal estacionados en la vía púbica, como una vía de ingresos.
Y trabajadores del hospital civil de la capital del crimen, colocaron letreros en las puertas de acceso, para denunciar que padecen desabasto de medicinas y materiales de curación.
Pidieron a los pacientes que entreguen sus quejas al director del hospital, del que dijeron en broma que no conocen ni de nombre, porque se trata de una persona déspota, intratable, con un genio endemoniado.
En tanto que en Nuevo León, el Gobernador independiente Jaime Rodríguez Calderón rindió su IV informe, que podría ser el último, pues los diputados de todas las bancadas lo acusaron de un montón de delitos y exigieron su renuncia.
Cumplen años Ramiro Garza Mata, El Muñeco; Juan Carlos Ruiz, Francisco Javier Estebané Ponce, Lupita Castañeda.

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