La pandemia no ha llegado a llegado a la cifra más elevada de contagios y fallecimientos. Los investigadores de la UNAM -que por cierto no es del agrado de la Presidencia de la República- y al rector de la misma no tiene la mínima aceptación de los que forman parte de la arenga denominada Cuarta Transformación. Esa escuela la primera en México después de Real Universidad Pontificia de México, sus investigadores estiman que la famosa “curva domada” se alcanzaría con al menos 30 mil fallecidos, y sépase que los estudiosos consideraron que aún cuando no hubo transparencia en los informes oficiales de Palacio Nacional, advierten que para el mes de agosto apenas se habría regularizado el comportamiento del Covid-19. Según la misma UNAM se estima que del mes de mes de Mayo al mes de Agoto la cifra de infectados aumente hasta más de 260 mil.
Pero tal parece que Palacio Nacional se ha preocupado más la aceptación y repudió de la figura presidencial. Por ello, urge que el hombre esté en los pueblos las calles y ciudades de la República Mexicana. Pues lo importante es ganar la calle, estar en todas las mesas y fomentar que se hable bien o mal pero que se mencione al Jefe del Ejecutivo Nacional, algo parecido le sucede a sus principal socio de Estados Unidos.
Pues ciertamente hay coincidencia relevantes entre ambos. Lo lamentable es que los escenarios que se observan en algunas ciudades de la Unión Americana, donde la disputa es entre blancos y negros, en los estados de la república mexicana están llegado al borde los chairos y fifís, como el mismo Jefe del Ejecutivo Nacional los denomino.
Igualito que su vecino, que motivó y retomó en sus discursos que rayan en la diferencia de clases pero que lamentablemente no le favorecen ni se ve que pudiera recomponer el discurso racista en los meses que le quedan para reelegirse en la presidencia de Estados Unidos.
Para quien las posibilidades parecen clausuradas y quizá la reunión que promueve en fecha próximas con le Presidente Mexicano, son para allanar las diferencias alentadas con la población migrante mexicana que vive en Estados Unidos.
Algo así como lo que ocurrió con el Ex Gobernador Tamaulipeco, Tomás Yarrington Ruvalcaba, cuando Bush Junior buscaba la reelección, quien durante una entrevista en una televisora de Los Angeles, California, la entrevistadora le preguntó que tenia algún amigo de origen latino y Bush le contestó, se llama Tomás Yarrington. El apellido le salió natural.
Se habrían conocido cuando Yarrington fue Alcalde de Matamoros 1993-1995 y Bush Junior era Gobernador de Texas, por ello tuvo la confianza de hablar de el como su amigo. Habrá que ver si en la actualidad diría lo mismo.
Algo parecido ocurre en la república mexicana con sus respectivas proporciones. A finales de la semana anterior, el Jefe del Ejecutivo Nacional se definió como un demócrata. Si como un demócrata que destaca por promover la división entre los mexicanos, un demócrata que quiere los 3 poderes en una sola persona.
Un demócrata que perdió su presea de Youtuver y esta en las calles con la pandemia a todo lo que da, pero dispuesto a recuperar su posición en las redes sociales. Lo cual se ve difícil de que ocurra. Y su alianza con el magnate de Estados Unidos la busca prolongarla, ya que a los dos les conviene jugar el mismo juego.
No obstante que se diga demócrata, es un título con tono de calificativo que el Instituto Nacional Electoral, como institución le regatea, y más bien es una adjudicación que no le ha concedido la prensa complaciente mucho menos la prensa critica.
Es un titulo que le ajusta mejor al Ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano, a quien Manuel Bartlet le robó la presidencia con la caída de sistema durante la contienda con el ex Presidente de Agualeguas, Carlos Salinas de Gortari.
Por lo pronto, la pandemia del coronavirus no ha doblado la curva a nivel nacional, en algunas regiones como Tamaulipas, da la impresión de que hubo distracciones del Consejo Estatal de Salud, pues resulta inconcebible que en un hospital de Reynosa se haya presentado un contagio masivo de enfermeras, especialistas y personal de intendencia.
Sin embargo, el contagio es severo lo mismo en Matamoros que en el Puerto de Tampico y la urbe petrolera por excelencia, Ciudad Madero. Y en municipios menores como Xicoténcatl, de donde son oriundos “Los Trucos” Verastegui Ostos.
No obstantes el estado de Tamaulipas se declaró listo para iniciar de manera gradual la reactivación del comercio y de las actividades esenciales. No así las actividades escolares en ningún nivel por los riesgos que representa.
Algo similar ocurre en el Estado de Nuevo León, desde dos semana antes, ya que una parte de las empresas liquido a un porcentaje relevante de sus plantas lo mismo ocurrió en el Puerto Industrial de Altamira, pues muchos por no decir que la mayoría de los industrial de Monterrey tiene inversiones en Altamira, Tamaulipas.
El Decreto del Gobierno de Tamaulipas, para la reapertura gradual se publicó ayer domingo en el Periódico Oficial del Estado. Con una modificación respeto a las disposiciones nacionales, ya que aquí en Tamaulipas se le denomina nueva realidad y a nivel nacional se le llama nueva normalidad. Debería decir de acuerdo a la nueva normatividad.
Y ojalá que se cumpla esa nueva normatividad, la cual esta contenida en leyes y decretos. Por ejemplo, los cubre bocas en los restaurantes y comercios lo mismo que agua y servicios sanitarios son básico para que se expida el tarjetón de Salubridad y no se cumple en la mayoría de los establecimientos comerciales de cualquier modalidad.
Pues la realidad es la misma, con los mismo impuestos y obligaciones fiscales para personas físicas o con actividad empresarial, es decir únicamente timbra la caja registradora de las administraciones gubernamentales pero no la de los empresarios, ni de los ciudadanos que desempeñan un empleo formal, pues hasta los maestros son clientes cautivos del fisco federal.