Una nuva ridiculez de los diputados observamos durante la sesion de esta semana en el Congreso del Estado, golpes en el escritorio de la mesa directiva, empujones, agresiones y gritos fue lo que volvimos a observar durante el desarrollo de la sesión; el argumento fueron  los cambios de comisiones y sus titulares.
Ridículo porque cómo puede ser posible que con la boca condenen y lamenten los hechos de violencia que ocurren en el pais pero en los hechos hacen lo mismo que critican; que falta de congruencia.
Condenan la violencia en contra de la mujer, pero violentan a sus compañeras diputadas.
Condenan el incremento en los casos de violencia intrafamiliar pero entre ellos se gritan, empujan y faltan al respeto.
Condenan las manifestaciones violentas para exigir causas justas, pero ellos hacen exactamente lo mismo para ser escuchados.
Guardan un miunto de silencio por la violencia en el estadio de Querétaro, pero promueven agresiones y empujones entre ellos mismos
¿Que clase de representantes sociales tenemos?
La pluralidad en un gobierno es buena, muy buena. La diversidad de opiniones enriquece los temas, la competencia partidista es sana y me parece justo que alcen la voz cuando consideren se esté cometiendo una irregularidad, eso no esta en duda, pero los diputados de MORENA se equivan una y otra vez en sus formas.
Luchan erroneamente por lo que consideran injusticias y en lugar de lograr que su voz sea escuchada lo único que están provocando es hundirse más de lo que ya se encuentran, su imágen como partido no ha sabido manejarse y en medio de un proceso electoral pareciera que su desesperación los lleva al precipicio.
Alguien tiene que recapacitar, en alguien debe caber la cordura.
Que Dios los bendiga, gracias.
Leo sus comentarios en mis redes sociales.