Aunque aún falta el fallo de la Sala Superior del Tribunal Federal Electoral sobre el último recurso de impugnación presentado por el PAN, para anular el cómputo estatal de la elección del 5 de junio en Tamaulipas, basados en los fallos anteriores, es casi un hecho que se rechazará y se confirmará el triunfo de Américo Villarreal en las urnas.

Y es que, más allá de los tribunales electorales y la guerra de declaraciones entre morenistas y panistas sobre si se validará la elección o habrá una extraordinaria en los próximos meses. Para la sociedad tamaulipeca, el Doctor Américo Villarreal Anaya, ya es el próximo gobernador de Tamaulipas.

Por lo que, en el este caso podemos decir aquella famosa frase surgida en la Europa medieval, unos dicen que en Inglaterra y otros que en Francia,  “El rey ha muerto ¡Viva el rey!”

Es decir, el poder político y social del aún gobernador se extingue y aún sin tomar posesión de su cargo constitucional el del gobernador electo crece.

Y es que, el ejemplo más contundente de momento, fue la realización por primera vez de dos ceremonias del Grito de Independencia en la misma ciudad, uno organizado por el gobernador Cabeza de Vaca y el otro por el alcalde Lalo Gattás, quien realmente, sólo fue el medio para mostrar la fuerza política y social con que cuenta el gobernador electo Américo Villarreal.

El segundo ejemplo se dio en el Congreso del Estado, con el retorno a la banca morenista de las diputadas Leticia Sánchez Guillermo y Nayeli Lara Monroy, la primera sumada abiertamente al PAN y la otra como independiente, pero curiosamente a unos días de asumir Villarreal Anaya el poder, recapacitaron y decidieron volver al partido que las llevó a obtener su curul y que a partir del 1 de octubre mandará en la gubernatura de Tamaulipas.

El tercero ejemplo, es que en las últimas semanas las notas de portada de los principales medios de comunicación, son las del gobernador electo Américo Villarreal, y ya no las de Cabeza de Vaca, ya sea porque el tribunal electoral falló a su favor, porque va a presentar a su equipo de transición o hasta por señalar en ruedas de prensa como los funcionarios actuales, entorpecen a propósito la entrega- recepción.

Y un cuarto ejemplo, es que tanto en cafés, oficinas de gobierno, en las propias familias o grupos de amigos, el tema recurrente es la forma en como gobernará Américo Villarreal, ¿si será igual que AMLO?, ¿si se acabará la corrupción o no?, ¿si meterá a la cárcel a aquellos que han saqueado al estado? o ¿qué sucederá con la seguridad?

Mientras más se acerque el 1 de octubre, el poder del mandatario actual desaparecerá y del que llega crecerá, que la etapa actual llegó a su fin y la nueva comienza ya. Por eso podemos decir “El rey ha muerto ¡Viva el rey!

Facebook: Antonio Frausto

Twitter: @AntonioFraustoG

Linkedin: Antonio Frausto

antoniofraustog@gmail.com