Después de lo mal que le fue en el 2º debate a Claudia Sheinbaum tendrá que pensarlo muy bien, si participa en un tercer ejercicio de esta naturaleza, algunos analistas con perfil nacional han referido que la ley en materia, sólo establece la obligatoriedad de dos eventos de esta naturaleza entre todos los candidatos a la Presidencia de la República. Efectivamente así lo establece el artículo 218, numeral 1 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (LGIPE).

El refranero dice que en estos casos más vale que digan “aquí corrió, que aquí quedó”. Lo cierto es que los días subsecuentes al debate del domingo pasado, incluyendo el inhábil 1º de mayo en “los debates del debate”, hubo un rosario de cuestionamientos, que incluso siguen flotando en las redes y en los medios de comunicación.

Están vigentes, porque los señalamientos precisos de Xóchitl Gálvez a su adversaria no fueron contestados, y el que calla otorga. Incluso en entrevistas aplicadas a Sheinbaum por figuras del periodismo como López Dóriga, la candidata de Morena respingó a Joaquín con notorio malestar, casi con un “tu también Brutus”, (la frase de Julio César cuando se sintió traicionado), porque esperaba una defensoría mediática, y no una oportunidad para responder los cuestionamientos que ahí están en el ambiente, sin respuesta.

2.- El artículo 218, numeral 1 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos  Electorales (LGIPE), establece que el Consejo General del INE organizará dos debates obligatorios entre todas las candidaturas a la Presidencia de la República. Sin embargo, existe un acuerdo para el Proceso Electoral Federal 2023-2024, donde el Consejo General del INE aprobó la celebración de tres debates presidenciales y el tercero debe ocurrir el 19 de mayo a las 20:00 horas.

En el desglose de ese acuerdo con fechas y horario preciso, el único debate que no lleva la condición de obligatorio es el primero, el del 7 de abril. En cambio presenta la indicación de obligatoriedad el 2º, ya celebrado el 28 de abril y el tercero que tendrá lugar el 19 de mayo de 2024 a las 20:00 horas.

De tal manera que a la doctora Sheinbaum no le quedará otra, que prepararse exhaustivamente para dar la batalla. No se puede ganar un debate cuando se quedan sin respuesta preguntas como las siguientes: ¿Se compromete a investigar a los hijos de AMLO en el tema del balastro en el Tren Maya donde se aduce sobre costo?

TIENE QUE CARGAR CON CORRUPCIÓN E INEPTITUD AJENAS

Tampoco respondió a la posibilidad de ordenar una investigación a la ex secretaria de Energía, Rocío Nahle, por los ejercicios presupuestales en la construcción de Dos Bocas.

En Veracruz donde Nahle se enfila a la gubernatura, es tema cotidiano las adquisiciones de propiedades que evidencian corrupción. Son millonadas de pesos que no cuadran con sus ingresos. Y en Internet, usted puede teclear el nombre de la zacatecana que aspira gobernar a los veracruzanos, y hay una inmensidad de información sobre sus bienes raíces.

La realidad es que Xóchitl tomó por sorpresa a Claudia, quien debió cuando menos dar una declaración política, como se estila en estos casos. Aceptar sin conceder, y dejar claro que su gobierno investigará a quien tenga que investigar, sin prevalencia de afectos partidistas.

En esas circunstancias, si Claudia Sheinbaum no se deslinda a tiempo, va a cargar con actos de corrupción, deficiencias e ineptitud ajenas que no sabemos hasta dónde la van a arrastrar. El sólo hecho de no defender a su progenitor político en el primer debate le valió un regaño y parece no estar dispuesta a otro jalón de orejas.

He ahí el dilema, deslindarse o no deslindarse.